Nuevo incidente de soldados alemanes con motivos nazis

Dos suboficiales del Ejército alemán destacados en el contingente de tropas de pacificación (SFOR) de Bosnia han reavivado el debate sobre elementos de extrema derecha en el Ejército de la República Federal Alemana. El pograrna Kennzeichen D, del segundo canal de la televisión (ZDF), informó ayer que dos militares habían maltratado a soldados albaneses, miembros del servicio de vigilancia, en la zona bajo custodia alemana con base en Rajlovac, en las cercanias de Sarajevo.

Los dos implicados, que según un portavoz oficial se encontraban completamente bebidos, se dirigieron a los albaneses con expresiones como "judío de mierda". Según la ZDF, los suboficiales habrían dicho a sus compañeros que Adolf Hitler les hubiera metido en la cámara de gas y, con eso, hubieran dejado de molestar. Los militares fueron multados con 5.000 marcos por cabeza (algo más de 400.000 pesetas) por beber estando de servicio. Según el portavoz militar, los albaneses habrían quitado importancia al incidente y rechazado las excusas dadas por los alemanes por considerar que no había motivo para ello.

Mientras tanto, las intenciones del ministro de Defensa, Volker Rühe, de poner a prueba regularmente la lealtad de los soldados mediante juramentos públicos han provocado una polémica en la clase política y militar alemana. El ministro se ha quejado en repetidas ocasiones de la falta de interés por el Ejército de los sectores de izquierdas y ha achacado a este desinterés el aumento del peso específico de los sectores de derechas.

Los derechistas del Partido Republicano alemán han decidido demandar a Rühe por considerar que sus afiliados son obligados, bajo amenaza de expediente disciplinario, a elegir entre su militancia y el Ejército.