Arabia Saudí desaprueba una operación de ataque

Arabia Saudí, Egipto y Marruecos expresaron ayer su oposición a un ataque contra Irak. El ministro egipcio de Asuntos Exteriores, Arrir Musa, declaró en Rabat, después de entrevistarse con el rey Hassan II, que egipcios y marroquíes, junto a la mayor parte de los países árabes, no respaldarán una operación de castigo contra el régimen de Sadam Husein.

Musa afirmó sentirse aún optimista sobre el resultado de los esfuerzos diplomáticos para desbloquear la última crisis causada por la insistencia de EE UU en que los inspectores de desarme de la ONU tengan acceso a todos los palacios presidenciales de Sadam.

Entretanto, Arabia Saudí hará saber al secretario de Defensa norteamericano, William Cohen, que no se sumará a un eventual ataque contra Irak. Cohen aseguró ayer a su llegada a Yeda que no pedirá a sus aliados suadíes el uso de las bases en el país porque no las cree necesarias para lanzar un ataque contra Irak. Los diarios saudíes informaron de que el hermano del rey Falid y ministro de Defensa, príncipe Sultán, ha manifestado que su país no aprueba un ataque. "No estamos de acuerdo y nos oponemos a atacar a Irak tanto como personas como en cuanto nación", citó el periódico en inglés Arab News como declaraciones del príncipe.

Arabia Saudí fue el país desde donde se lanzó en 1991 el ataque aliado contra Irak para expulsar a las tropas de ocupación iraquíes de Kuwait en el verano del año anterior. últimamente ha surgido un sentimiento contra EE UU en los emiratos del Golfo, si bien las monarquías petroleras árabes siguen contando con una gran presencia militar norteamericana.