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Las TV públicas y privadas defienden la autorregulación frente a la "telebasura"

Abogan para que en televisión se permita lo que se tolera en la sociedad

Los responsables de las televisiones públicas y privadas españolas defendieron ayer la autorregulación de los medios como el mejor mecanismo para garantizar la calidad de los programas y evitar por tanto la telebasura durante la jornada Los contenidos audiovisuales en el marco de la Unión Europea, organizada por el Grupo Parlamentario Socialista y celebrada en el Senado.

Los representantes de las cadenas consideran compatible esta autorregulación con la constitución por las fuerzas políticas de un consejo de control audiovisual que en su opinión debe cumplir dos condiciones: debe nacer como resultado de un consenso parlamentario para que tenga autoridad moral y sea operativa; y evitar a toda costa convertirse en un instrumento de censura previa. En definitiva, la orientación de ese organismo debe ser, como resumió Mikel Lejarza, subdirector general de contenidos de Tele 5, "que lo que no esté permitido en la sociedad no lo esté en televisión".

Carlos Abad, director general de Canal +, inició su intervención advirtiendo contra Ias actitudes hipercríticas" contra este medio por aquellos que lo ven como la única fuente de "mensajes pervertidores", para enumerar acto seguido lo que a su juicio deberían ser alguno de los principios orientadores del futuro órgano regulador de contenidos audiovisuales. Deberá estar basado, afirmó Abad, "en la propia autorregulación de las cadenas" y eliminar "cualquier tentación que pueda conducir a mecanismos de censura previa o de paternalismo, esa idea de que hay que proteger a los ciudadanos de ellos mismos".

El director general de Canal + distinguió entre la autorregulación de las televisiones generalistas y las de pago, ya que el usuario de estas últimas tiene los suficientes medios técnicos para ejercer su propio control de contenidos.

Radiobasura

Mikel Lejarza también hizo hincapié en las exageradas críticas a la televisión y se preguntó: "¿Por qué se habla de telebasura y no de prensabasura o radiobasura? ¿Por qué se califica así a las tertulias frívolas en televisión y no a las tertulias de la radio donde se insulta y se miente?".Lejarza también destacó el "papel industrial" de los contenidos y no sólo sus valores éticos. Afirmó que España es uno de los países que más gastan en televisión -"entre 300.000 y 350.000 millones de pesetas al año"- y en cambio, "no exporta prácticamente nada excepto la Liga de fútbol". Para el directivo de Tele 5 "España está perdiendo la oportunidad histórica de convertirse en el segundo productor audiovisual del mundo; de pasar de cliente de EE UU a vendedor".

Por su parte, Consuelo Álvarez de Toledo, Defensora del espectador de Antena 3, también se declaró partidaria de la autorregulación y "de la responsabilidad de la iniciativa privada". "Antena 3 asume su responsabilidad y competencia sobre sus contenidos y se autorregula en función de sus intereses y objetivos cumpliendo la normativa vigente", afirmó. En el mismo sentido se manifestaron Luis Guerra, director de la asesoría jurídica de la TVG, y Josep Llago, jefe del gabinete de relaciones externas de Canal 9. Más escéptico se mostró Jaime Nicolás, director de estudios de RTVE, quien, aunque defensor de la autorregulación, no consideró que nuevas normativas vayan a contribuir a impedir la telebasura.

Eduardo Abellán, director general de Canal Sur, exigió la constitución urgente de un consejo audiovisual mediante ley orgánica y elegido por el Parlamento ya que resulta "imprescindible en un mercado sin reglas donde parece que todo vale".

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