Aznar afirma que la estabilidad permite al Gobierno "profundizar" las reformas

José María Aznar volvió a entonar ayer en Polonia el "España va bien" apoyándose en el respaldo parlamentario que le ofrece Convergència i Unió (CiU) y en el diálogo, aunque sea de sordos en algunos aspectos de la política antiterrorista, con el PNV. El presidente del Gobierno valoró la estabilidad que le ofrecen sus socios nacionalistas en el año que comienza y dijo contemplar el futuro inmediato de forma "muy optimista". La estabilidad, añadió, le va a permitir al Gobierno "profundizar el proceso de reforma".

Aznar rubricó ayer en Varsovia con su homólogo polaco, Jerzy Buzek, una declaración conjunta la que España expresa su apoyo al ingreso de Polonia en la Unión Europea y en la que ambos Gobiernos se comprometen a desarrollar e intensificar las relaciones bilaterales.Si hace unos años el modelo español de transición a la democracia era la referencia, ahora es la experiencia española en la negociación de ingreso en la UE lo que se ofrece a los países del desaparecido bloque socialista que llaman a las puertas de la comunidad. En la conferencia de prensa que siguio a la firma de la declaración conjunta hispano-polaca, Aznar respondió, con voluntad de despejar dudas, que España desea el ingreso de Polonia en la Unión Europea "cuanto antes", aunque la fecha sólo la conozca la "divina providencia".

El mensaje de Aznar fue claro: España desea y apoya ese ingreso de Polonia, futuro aliado en la OTAN y el mejor mercado español en esta zona de Europa, pero no oculta que las negociaciones se basan en aspectos técnicos y comerciales, en los que todos los países defienden sus intereses, lo que obligará a sacrificios para afrontar la situación. España,como principal país receptor de fondos de ayuda comunitarios,quiere que quede claro que las ayudas a los países del Este no deben ser a costa de los países mediterráneos.

En el plano político español, el presidente del Gobierno se volvió a felicitar por el periodo de estabilidad reforzada que le ofrecen sus socios catalanes, lo que le va a permitir "profundizar el proceso de reforma". A preguntas de laprensa española, el presidente del Gobierno dijo que "la estabilidad es un factor positivo en sí mismo, y mucho más positivo cuando se pone de manifiesto para servir a una acción política positiva y de progreso. económico y social evidente en nuestro país". -

Todo ello le hace contemplar el año que comienza de una forma muy optimista. "Vivimos un momento de mucho optimismo. Hagamos lo posible para reforzar la estabilidad, porque cuanto más sólida sea será mejor para seguir profundizando en el proceso de reformas".

La evidente dificultad que encuentra para acordar con el PNV una política común frente al terrorismo. no le impidió cantar las excelencias del diálogo invocado por el lehendakari Ardanza con motivo del décimo aniversario del Pacto de Ajuria-Enea. "Todo lo que sea incentivar los procesos de diálogo me parece muy positivo" comentó. Diálogo, precisó, "con los partidos que forman la mayoría de Gobierno en España" que, en su opinión, ha sido "muy positivo" y espera que lo siga siendo en el futuro. La oposición, y concretamente el PSOE, puede seguir esperando.

La primera jornada oficial de la visita de Aznar, que hoy regresará a media tarde a Madrid, tuvo un ritmo frenético. Tras su entrevista con el primer ministro y la reunión plenaria de la delegación del Gobierno español, encabezada por el, secretario de Estado de Política Exterior, Ramón de Miguel, y el secretario de Estado de Comercio, José Manuel Fernández Norniella, con la delegación del Gobierno polaco, Aznar almorzó con empresarios españoles y polacos. Después, visitó al presidente de la República, Aleksander Kwasniewski, hizo una ofrenda floral ante la Tumba del Soldado Desconocido, pronunció unas palabras en el Instituto Cervantes y abrió una ronda de entrevistas con líderes de Solidaridad, entre ellos su histórico dirigente, Lech Walesa. Por la noche acudió a una cena oficial ofrecida por el primer ministro, Jerzy Buzek.