Gobierno y PNV no se ponen de acuerdo en la lucha contra ETA

El Gobierno y sus socios nacionalistas vascos constataron ayer de nuevo sus profundas discrepancias en política antiterrorista. El presidente José María Aznar y el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, se reunieron durante cuatro horas en La Moncloa con el lehendakari José Antonio Ardanza y con el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, para hablar sobre todo de la lucha contra ETA. No hubo acercamiento de posturas ni foto conjunta a la entrada ni a la salida del encuentro, sobre el que oficialmente sólo informó el Gobierno.

Pese a las profundas diferencias que mantienen Gobierno y nacionalistas vascos en política antiterrorista, Mayor Oreja valoró en rueda de prensa el encuentro porque desbloqueaba un largo periodo en el que el diálogo ha sido casi inexistente. El ministro del Interior afirmó que las divergencias entre ambas partes datan de hace tanto tiempo que era "muy difícil" solventarlas en sólo cuatro horas de diálogo. Fuentes nacionalistas valoraron también positivamente el hecho de que el Gobierno central se comprometiera a "darles una vuelta" a sus propuestas. En la reunión, Ardanza defendió la necesidad de que el Gobierno haga gestos para conseguir forzar a ETA por la vía del diálogo, pero el ministro del Interior mantuvo que es la banda terrorista quien debe moverse. El terrorismo ocupó la mayor parte de la reunión. En otros asuntos, el PNV seguirá apoyando al Gobierno, aunque lo condicionará al desarrollo del Estatuto. Así se lo manifestó Arzalluz a Aznar. Por su parte, el vicelehendakari, Juan José Ibarretxe, manifiestan una entrevista con EL PAÍS fue "el asesinato de José Ignacio Iruretagoyena no ha supuesto ningún cambio sustancial. ETA lleva años asesinando a vascos. A policías nacidos en Euskadi, a ertzainas, a militantes del PNV, del PSOE y del PP, y a otros muchos vascos".