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Desactivado un artefacto explosivo en la Seguridad Social de San Sebastian

Aurora Intxausti

ETA intentó en la madrugada de ayer dejar de nuevo su marca en San Sebastián con una bomba, casera, compuesta por cinco kilos de amosal, que colocó en los soportales de las oficinas de la Seguridad Social. El explosivo, que se encontraba dentro de una olla a presión metida en una mochila, fue neutralizado por agentes de la unidad de desactivación de explosivos de la Ertzaintza (UEDE). El departamento vasco de Interior cree que, de haber estallado, el artefacto habría causado graves daños en la estructura del edificio y en las casas vecinas.

Minutos antes de las seis de la mañana, la central de Detente y Ayuda (DYA) en San Sebastián recibió una llamada telefónica en la que, en nombre de ETA, se avisaba de que en el plazo de 15 minutos estallaría una bomba a la entrada de la Seguridad Social, en la calle de Podavines.Una patrulla de la Ertzaintza se trasladó al inmueble, en el barrio de Amara, y comprobó que había un objeto sospechoso, una mochila, en los soportales. De inmediato se alertó a los vecinos de los edificios contiguos para que adoptaran medidas precautorias.

La bomba, de fabricación casera, contenía cinco kilos de amosal -amonal (nitrato amónico y un explosivo plástico) más polvo de aluminio con el fin de que la deflagración provoque fuego- Estaba el el interior de una olla a presión y tenía un temporizador y un detonador. Agentes de la UEDE procedieron a neutralizarla desmontándola pieza a pieza, trabajo que concluyeron alrededor de las ocho y media de la mañana.

A última hora de ayer, agentes de la UEDE desactivaron otro artefacto explosivo colocado en una sucursal de la aseguradora Catalana Occidente ubicada en la calle Santa Clara de Zarautz. Al igual que en el caso de San Sebastián, una llamada anónima alertó de la colocación del explosivo sobre las 22.30. Hora y media después, la Ertzaintza, tras acordonar la zona, había desactivado el artefacto, compuesto por una bombona de cámping gas, cinco litros de gasolina y un iniciador con potasa.

En diciembre pasado y este mes de enero se ha incrementado de manera espectacular en Guipúzcoa la actividad de ETA y de sus grupos de apoyo. Además de los múltiples sabotajes llevados a cabo en una decena de pueblos de la provincia -quema de coches, algunos de ellos de concejales, y cajeros bancarios- el comando Donosti ha asesinado a dos ediles del PP: José Luis Caso, de Rentería, tiroteado en un bar de Irún, y José Ignacio Iruretagoyena, de Zarautz, en cuyo vehículo se instaló una bomba. También se ha intentado atentar contra la concejal de San Sebastián Elena Azpiroz, en una acción en la que resultó herido su escolta, José Luis Lobato.

Ayer mismo, la titular del Juzgado Central número 3 de la Audiencia Nacional, Teresa Palacios, ordenó el ingreso en prisión, tras tomarles declaración, de los dos jóvenes detenidos el miércoles en Pamplona como supuestos componentes de un grupo Y, de apoyo a la banda terrorista.

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Tanto Guillermo G. M., nacido en la capital navarra en 1979, como Jordi P. P., en Bilbao en 1978, están acusados de un delito de terrorismo, lesiones y daños materiales, por haber lanzado presuntamente cócteles mólotov contra la policía tras un acto convocado por HB en Pamplona, en diciembre de 1996, así como por incendiar varios cajeros.

Por otra parte, la juez Palacios decretó ayer el ingreso en prisiónde Izar Etxebeste Etxabe, de 27años, detenida en la madrugada del pasado lunes en San Sebastián por colaborar con ETA. Etxebeste reconoció ante la juez que albergóen su casa a varios activistas, entre ellos , Fernando Elejalde, el miembro del comando Donosti detenido tras participar en el asesinatodel psicólogo de la cárcel de Martutene Javier Gómez Elósegui.

Asimismo, a primera hora de la tarde, la juez Palacios autorizó al Cuerpo Nacional de Policía a registrar un piso de San Sebastián supuestamente utilizado por dicho comando, sin que haya trascendido que se hayan encontrado documentos o explosivos.

Aránzazu Martín Cia, de 26 años y Ricardo Balerdi Ibarguren, de 29, detenidos el mismo día que Etxebeste, han quedado en libertad provisional.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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