Redoblada vigilancia en el Ulster por temor a más ataques

, Las fuerzas de seguridad de Irlanda del Norte redoblaron ayer el número de efectivos en los principales barrios católicos y protestantes en prevención de nuevos ataques de los grupos terroristas opuestos al proceso de paz.La medida se adoptó tras una reunión extraordinaria entré la ministra británica Mo Mowlam y el responsable del Royal Ulster Constabulary (RUC, policía de la provincia norirlandesa), Ronnie Flanagan, celebrada por la mañana en Stormont (Belfast). Las amenazas de muerte siguen enrareciendo el ambiente político en Irlanda del Norte.

Con tres asesinatos desde el pasado sábado, los grupos más extremistas refuerzan su espíritu de venganza mutua. De momento, dos organizaciones, la Fuerza de Voluntarios Lealistas (FVL) y la Fuerza de Acción Católica (FAC), una brigada poco conocida que podría actuar de tapadera de los republicanos del INLA (Ejército Nacional de Liberación de Irlanda, una escisión del IRA), han amenazado con elevar el número de víctimas en ambos sectores de la comunidad en los próximos días. Con su nueva campaña de terror, la FVL venga la muerte hace una semana de su líder, Billy Wright, a manos de pistoleros del INLA en la prisión de máxima seguridad de Maze.

En vista del deterioro de la situación, el RUC reforzó ayer sus patrullas para cubrir puntos vulnerables de la provincia como iglesias, bares, hoteles y centros comunitarios. "Hemos reforzado la vigilancia para contrarrestar la amenaza", explicó el jefe del RUC tras reunirse con Mowlam, la ministra británica para Irlanda del Norte, que se ha visto obligada a acortar sus vacaciones.

La vigilancia, sin embargo, es discreta. El Ejército acompañó en casos aislados a las patrullas de agentes policiales. Y no hubo controles de carretera como losque eran una constante en Bel fast y sus alrededores durante las épocas más violentas de un conflicto que dura más de 28 años. El reforzamiento se tradujo ayer en todoterrenos blindados y agentes de policía que recorrían las principales calles de la ciudad. "Hemos sufrido un retroceso, 'pero la situación está bajo control", dijo Mowlam. Paradójicamente, las medidas de seguridad eran más visibles en la República de Irlanda. Con controles de carretera en ciudades fronterizas como Dundalk la policía irlandesa vigiló estrechamente la entrada y salida de vehículos durante toda la jornada.