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Una nueva agresión alarma a los colectivos de inmigrantes de Almería

Mjabid Dahmani vive en Balanegra, un núcleo dependiente del municipio almeriense de Berja. La noche del pasado lunes fue agredido y expulsado de un bar de la localidad al que había acudido. En el local se encontró una vez más con el rechazo del propietario del local. Pero esta vez el dueño no se conformó con decirle que saliera de su establecimiento, donde no quiere ver a inmigrantes. Dahnani respondió con algunas palabras al empujón con el que violentamente se le obligaba a salir del local. El agresor agarró entonces un bate de béisbol y comenzó a golpear a Mjahid Dahmani, al que causó varias heridas.

Mjahid Dalimani llegó hace ya 10 años a Balanegra procedente de Marruecos. La agresión que sufiró viene a sumarse a otras que se han producido durante las últimas semanas en la provincia de Almería y que han llevado la preocupación y la alarma a los colectivos de inmigrantes de la provincia.Fue el propio Dalimani quien avisó a la Guardia Civil, que lo trasladó a un centro sanitario. Tres puntos cerca del ojo derecho y un brazo herido son algunas de las lesiones que le causó la paliza. Al día si guiente el agredido formalizó una denuncia en cuartel de la Guardia Civil de Berja, sin embargo la persona que le propinó la paliza no ha sido detenida.

Esta nueva agresión contra un inmigrante se produce cuando apenas ha transcurrido una semana de las palizas que recibieron dos norteafricanos en El Ejido. También en esta ocasión el agresor se ensañó con su víctima. A fuerza de golpes le dejó claro que no le gustan los inmigrantes. Tampoco deben de gustarles a las personas que en ese momento se encontraban en el bar y que no hicieron absolutamente nada para frenar la agresión.

Dalimani no contó con ayuda por parte de nadie. Sólo tuvo tiempo para protestar porque lo echaban a la calle de forma violenta. A partir de ahí comenzó a recibir los golpes del bate de béisbol que empuñaba su agresor

Más casos

La paliza que ahora se ha conocido no es, sin embargo, un caso único en Balanegra. En el mismo local en el que fue agredido el inmigrante marroquí se han producido con anterioridad hechos similares contra trabadores procedentes del norte de África. Al menos se tiene constancia de cuatro agresiones más a otros tantos inmigrantes en este local.La primera tuvo lugar hace ya más de seis meses. Pero, nadie denunció los casos anteriores. Algunos no se atrevieron ya que carecían de documentación y temían las consecuencias, otros callaron por miedo.

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Los hechos parecen estar desmontado la tesis de quienes aseguraron que las palizas que recibieron durante dos días Brahim Hicham y Bou Bakeur Garami en El Ejido eran hechos aislados. A esta versión se. apuntó el alcalde ejidense, el popular Juan Enciso, quien, tras emitir una escueta nota oficial sobre las agresiones, no ha vuelto a pronunciarse.

Mientras Mjahid Dahmani se recupera de las lesiones de la paliza que le propinaron en la noche del lunes, los emigrantes que residen en la provincia almeriense, especialmente en la zona de Poniente, esperan la autorización para la manifestación de protesta contra las agresiones, que piensan realizar el próximo lunes día 29 ante el ayuntamiento de El Ejido. Ese mismo día los comerciantes han convocado una contramanifestación, lo que hace que los emigrantes duden si finalmente su solicitud será aprobada.

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