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Nixon chantajeó a las grandes cadenas de TV para mejorar su imagen

Desclasificadas nuevas conversaciones grabadas al ex presidente en la Casa Blanca

Richard Nixon usó su poder como Presidente de los Estados Unidos para amenazar a las tres grandes cadenas de televisión: la ABC, la CBS y la NBC. El Washington Post y el semanario Newsweek han publicado la transcripción de nuevas conversaciones grabadas en el despacho presidencial de la Casa Blanca; una larga batalla judicial ha permitido que en los últimos meses el Archivo Nacional desclasifique poco a poco el contenido de esas grabaciones.Nixon y sus ayudantes en política de comunicación amenazaron a las tres cadenas generalistas con la posibilidad de aprobar una Ley Antimonopolio que las haría perder enormes cantidades de dinero. "Si nos trae más cuenta amenazar a las televisiones que sacar adelante la ley", dice Nixon en una grabación, "mantengamos la amenaza". La mayor parte de las grabaciones recogen la opinión y las confabulaciones de Nixon con su ayudante Charles W. Colson, encargado del tratamiento del gobierno en los medios de comunicación. "Esta ley antimonopolio que podemos hacer", le dice Colson a Nixon, "da igual que sea buena o mala, no hay que entrar en esa consideración: mantenerla como posibilidad nos permite tener cogidas a las tres grandes cadenas con una espada de Damocles sobre ellas". Nixon le responde: "Nuestro beneficio es más importante que el beneficio económico. Nos da exactamente igual el beneficio económico. Nosotros aquí estamos haciendo política... y lo de joder a las cadenas de televisión es algo que me gusta".

En ese periodo, el entonces Fiscal General John N. Mitchell sí llegó en realidad a plantearse la posibilidad de una Ley Antimonopolio, pero Nixon -personalmente- frenó esa iniciativa para poder chantajear con ella a las grandes cadenas de televisión.

Las conversaciones desclasificadas demuestran hasta qué punto las más altas instancias del Gobierno trataban de ejercer un control directo sobre la información facilitada por los grandes medios.

Nixon estaba tan obsesionado por el tratamiento que le daban en los programas informativos que su ayudante llegó a plantearle la posibilidad de crear un departamento cuya única misión sería enviar cartas a las secciones de Cartas al Director de los periódicos y hacer llamadas a radios y televisiones con intervenciones claramente favorables al gobierno y en contra de los enemigos políticos de aquella etapa. El propio Colson buscó una sede en el Comité Nacional del Partido Republicano.

Obsesión enfermiza

De las conversaciones se desprende que Richard Nixon tenía una fijación enfermiza con el tratamiento de su propia imagen. Sus ayudantes le entregaban a diario un informe minuciosamente detallado en el que se medía -en segundos- el tiempo que los programas informativos de la televisión habían dedicado al presidente. Con el informe en la mano, Colson se entrevistaba con los responsables de las cadenas y ponía sobre la mesa el argumento de la Ley Antimonopolio. En las grabaciones, Nixon le dice al Jefe de Gabinete de la Casa Blanca, H.R. Haldeman: "Colson empezó [con las presiones] poco a poco, pero cuanto más duro se pone, mejor nos tratan las cadenas de televisión". Nixon y Colson llegaron a tener tanto poder sobre esas cadenas que exigieron -y consiguieron- que la NBC hiciera un programa especial sobre la boda de la hija del presidente, y que el programa se volviera a emitir unos días después. Casualmente, en su día la NBC hizo mención al "enorme número de llamadas telefónicas" de personas que pedían la repetición del programa.Las conversaciones -que forman parte de un total de 200 horas de grabaciones desclasificadas llegan a mostrar el asombro de Nixon y sus ayudantes por los efectos de su propia política de amenazas a los medios de comunicación. "El informativo CBS Morning News", le comenta Colson a Nixon el 23 de Julio de 1971, "hizo ayer un reportaje que era asquerosamente favorable a nuestra política en Vietnam".

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