Los partidos tradicionales paran el avance xenófobo en Dinamarca

Los buenos resultados del xenófobo Partido del Pueblo Danés en las elecciones del martes para renovar ayuntamientos y diputaciones no harán cambiar la relación de fuerzas políticas en el país nórdico, dado que los otros tres grandes partidos tradicionales (socialdemócrata, con el 33,1%; liberal, con el 25% y conservador, con el 12%) han mantenido sus posiciones, con ligeros retrocesos.

El PPD ha obtenido el 6,8% de los sufragios, lejos del 10% que le llegaron a augurar algunos sondeos, pero aun así suficiente para estar presente en 142 de los 275 consistorios en juego. Su líder, Pla Kjaersgaard, se felicitó "por este avance fantástico". "Los resultados de esta votación demuestran que ya se ha colmado la paciencia de los electores con la pasividad política del Gobierno ante la inmigración", remachó Kjaersgaard, que instó durante la campaña a "votar danés" y dijo que "Dinamarca es un pequeño país homogéneo que no debe ser transtornado" por los extranjeros.

Jormi Hansen, líder del Movimiento Nacionalsocialista Danés, partido de ideología nazi que por primera vez en Europa desde la guerra concurría a las urnas, sólo obtuvo 137 votos, uno de cada 200 sufragios en su circunscripción.