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LAS CUENTAS DEL 92

El PSOE responde a las "injurias" y "calumnias" del PP con las irregularidades de Madrid 92

Los socialistas ven, detrás de las imputaciones contra los gestores de la Expo 92, una alianza del PP e IU para aplicar la "política del garrote", ya que tenían fabricado de antemano su veredicto sobre las cuentas de la Exposición Universal e incluso preparada "la horca, que sacarán algún día de éstos", según el portavoz del PSOE en el Congreso, Juan Manuel Eguiagaray. Indignado con que los populares retomen el "calumnia que algo queda", el PSOE pidió ayer que el alcalde de Madrid, José María Alvarez del Manzano, explique al Parlamento las irregularidades de Madrid Capital Cultural (1992).

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Los socialistas quisieron dejar constancia de que se van a defender, y no van a dejar sin respuesta las acusaciones de que han incurrido en delitos, cuando en este caso el informe de la fiscalía del Tribunal de Cuentas no señala que se haya cometido irregularidad alguna en la Expo. El fiscal y e¡ abogado del Estado han pedido que se investiguen algunas indemnizaciones que no debieron pagarse.Apoyado en ese hecho, el portavoz socialista en la Comisión Congreso-Senado para las Relaciones con el Tribunal de Cuentas, Sergio Moreno, afirmó que los populares están acusando implícitamente a la fiscalía de prevaricación, por no haber denunciado los delitos que el Grupo Popular asegura ver en la gestión de la Expo.

Juan Manuel Eguiagaray ironizó con que a los populares les deben ir mal las encuestas de intención de voto porque han retomado la política de "calumniar, injuriar y colocar el debate político en un camino indeseable", como es el imputar delitos a los adversarios políticos sin ningún fundamento. Algo que ya ocurrió, recordó, cuando el Gobierno de Aznar acusó a los ex gobernantes socialistas de haber concedido a "sus amigos" una amnistía fiscal por importe de 200.000 millones.

Eguiagaray describió que primero se les imputó un delito, luego irregularidades administrativas, después sólo negligencias, y el asunto terminó diluido en una mera discrepancia sobre el reglamento de recaudación de tributos. "Todavía", añadió, "somos acreedores de que Aznar nos pida excusas por lo que nos acusó". Con ironía, se preguntó si el Gobierno considera que la petición de disculpas consiste en que el vicepresidente Rodrigo Rato haya propuesto al ex ministro socialista Pedro Solbes, "tras haberle tratado casi de delincuente con las acusaciones sobre la amnistía fiscal-, como candidato a la presidencia del Banco Europeo de Desarrollo.

Eguiagaray reprochó a los populares que identifiquen pérdidas económicas -las de la Expo ascendieron a 35.000 millones de pesetas, según el Tribunal de Cuentas- y llevarse el dinero, cuando son cosas bien distintas. No obstante, el PSOE va a usar los mismos cauces parlamentarios que el PP para exigir explicaciones a algunos responsables populares de sociedades públicas con pérdidas.

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Después de que el PP ha conseguido que el próximo lunes comparezca, en la Comisión del Tribunal de Cuentas, el presidente de la sociedad que heredó la gestión del patrimonio de la Expo, AGESA, el PSOE reclamó ayer la comparecencia del alcalde de Madrid, en cuanto presidente ejecutivo del Consorcio para la Organización de Madrid Capital Europea de la Cultura. Eso sí, Eguigaray subrayó que al PSOE, a diferencia del PP, "ni se le pasa por la cabeza imputar delito alguno" al alcalde.

La fiscalización de ese consorcio, dirigida por el consejero Andrés Fernández Díaz y aprobada por unanimidad en el Tribunal de Cuentas, se halla pendiente de las conclusiones del Parlamento.

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