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La Alfonso X despidió a profesores por suspender mucho, según una juez

La universidad privada Alfonso X el Sabio despidió en julio, de forma injustificada, a un mínimo de cinco profesores que no se plegaron a las exigencias de que aumentaran el número de aprobados, según denunciaron los afectados. La titular del Juzgado de lo Social 24 de Madrid, Emilia Teresa Díaz, ha declarado nulos tres de estos despidos e improcedentes los dos restantes, al advertir "un nexo de causalidad entre notas, resultados y despido". La juez atribuye a la universidad una "vulneración del derecho fundamental a la libertad de cátedra, reconocido en la Constitución".La universidad se había referido, entre otros motivos, a la "falta de puntualidad" de sus profesionales para justificar las expulsiones. El fallo judicial dictamina, por contra, que la empresa "no ha acreditado las imputaciones" que vierte en sus cartas de despido. El móvil real de los despidos, continúa la juez, "no puede ser otro que la desatención a los requerimientos verbales" de la universidad hacia sus trabajadores. En el apartado de hechos probados consta que los profesores sufrieron "fuertes presiones" en reuniones "en las que se les expresó el bajo índice de aprobados, con indicación de que, si no aprobaban más, los echaban".

La Alfonso X el Sabio, constituida en 1994 y radicada en Villanueva de la Cañada, comunicó el pasado 21 de Julio un total de nueve despidos y en otros 16 casos no se renovó el contrato a los profesores, adscritos en su mayoría al departamento de Física y Matemáticas. Aún no se conocen los fallos de la juez a los casos de los otros cuatro profesores despedidos, pero el comité de empresa vaticina que seguirán la línea de la nulidad o la improcedencia.

La sentencia, sin precedentes en la universidad privada española, reabre de forma muy llamativa el debate sobre si en estos centros prima la calidad de enseñanza o los criterios propios de empresas con ánimo de lucro. La universidad dispone ahora de cinco días para presentar recurso de súplica ante el Tribunal Superior de Justicia.

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Tasas elevadas

Los readmitidos señalan al rector como autor de las presiones para que subieran las notas

En sus cinco sentencias, muy semejantes entre sí, la magIstrada Emilia Teresa Díaz des monta estos razonamientos, ya que el empresario no cumple en ningún momento con' su obligación de "asumir la carga probatoria de los hechos generadores del despido". Por ello, la juez llega a la convicción" de que los despidos obedecen "a un móvil ajeno a los motivos esgrlmidos". Y ese móvil remacha Díaz Fernández, "no puede ser otro que la desatención" a las peticiones verbales, por parte de la empresa, de que estos profesores suspendieran menos.Las sentencias subrayan que la actuación de la Universidad Alfonso X el Sabio en este tema supone "una vulneración del derecho fundamental a la libertad de cátedra", que la Constitución reconoce en su artículo 20. La entidad debe readmitir a sus trabajadores en el caso de los despidos nulos, e indemnizar a los improcedentes con sus sueldos de julio a octubre y una cantidad adicional.

. Los despedidos acogieron, con "satisfacción" los fallos judiciales y se mostraron dispuestos a reincorporarse a sus puestos. "Volvemos con la esperanza de que las cosas cambien, de que sea una universidad de verdad", enfatizó Mustieles.

Sin comentarios en la Alfonso X

Los órganos directivos de la Universidad Alfonso X el Sabio, en el campus de Villanueva de la Cañada, han acogido con el mayor de los silencios, las sentencias que les obligan a readmitir a tres de los profesores despedidos. Antonio Bellver, su secretario general y portavoz autorizado desde que estalló el conflicto, no quiso hacer comentarios."Hasta que las sentencias no sean firmes, no haré ningún tipo de declaración", se limitó a referir. ¿Significa eso que la universidad intentará la vía del recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid?, se le preguntó. "Piensen lo que quieran", fue su respuesta. Este periódico también intentó, sin éxito, contactar con Jesús Núñez Velázquez, accionista mayoritario de la universidad, además de propietario de un par de colegios de élite bien conocidos en la región, el Monfort y el Santa Cristina.

Núñez se encontraba ayer en un hotel de Barcelona en el que la patronal de la enseñanza privada no concertada, que él mismo preside, celebraba una Junta directiva. El empresario no contestó las llamadas de este diario y una secretaria se encargó de comunicar que el único informante válido era "el señor Bellver".

En septiembre, Bellver se rfirió a los ahora readmitidos como "escobas viejas" que empezaron con fuerza, pero habían dejado de rendir.

Educación anuncia que investigará el caso

El conocimiento de las sentencias causó ayer un notable revuelo en la Consejería de Educación y Cultura de la Comunidad de Madrid. Su titular, Gustavo Villapalos, se comprometió a "estudiar con detenimiento la sentencia", de la que quiso conocer un adelanto de su contenido. Cuando se le comunicó que la juez entiende que "existe un nexo de causalidad entre notas, resultados y despido", el consejero exclamó: "Si eso es así, vamos a investigar el tema. Daré orden inmediatamente, para que se inspeccione lo ocurrido en la Alfonso X".Villapalos ya había hecho un primer análisis sobre el caso de esta universidad en la revista Tiempo de la semana pasada, antes de conocerse las sentencias. En un reportaje titulado Universidad privada: calidad en la enseñanza o mercado de títulos, el ministro de Ruiz-Gallardón expone: "Si el título no es lo suficientemente prestigioso, la gente no irá allí. Nosotros no podemos velar por la calidad de la enseñanza en cada titulación [privada]".

La portavoz en temas educativos de IU en el Congreso, Inés Sabanés, resaltó que las resoluciones judiciales "establecen una conexión directa entre las presiones y los despidos, lo que confirma unos indicios de mucha gravedad". Sabanés ha preguntado al Gobierno sobre este tema, "porque la Administración no puede seguir lavándose las manos".

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