Medio Ambiente pierde su quinto alto cargo en dos años

Los puestos políticos duran poco en la Consejería de Medio Ambiente. El director general de Calidad Ambiental de la consejería, José Orlandis, dejó su cargo la semana pasada por "razones profesionales". "Orlandis [un ingeniero de telecomunicaciones de 30 años] recibió una oferta del sector privado y la aceptó, explicó ayer el consejero de Medio Ambiente, Carlos Mayor Oreja. José Orlandis se convierte así en el quinto alto cargo de esta consejería que abandona su puesto antes de tiempo.Le precedieron en su salida inesperada el viceconsejero de Medio Ambiente, Fernando Acedo-Rico, que se marchó un mes después de llegar al cargo; el secretario general técnico de la consejería, que abandonó su puesto al tiempo que Acedo-Rico; el director general de la Agencia de Medio Ambiente, Ignacio Claver, que fue relevado al desaparecer la agencia, y el director general del Medio Natural, Odón Pallà.

Mayor Oreja, ante tanto baile de sillas, dice que "cuando los cambios se producen hay que aceptarlos". De esta manera comenta el hecho de que, de los seis altos cargos con que cuenta su consejería, ya haya cambiado, en poco más de dos años, a los titulares de cinco. Sólo permanece firme al pie de cañón el director general de Administración Local, el abogado y ex alcalde de La Cabrera Alejandro Sanz.

Uno de cada cuatro

El porcentaje de cambios en los altos cargos del Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón supera el 25%. La mayoría de ellos han partido hacia cargos en la Administración central -el Gobierno de José María Aznar se llevó ocho- o en empresas privadas, donde las retribuciones son más altas.Luis Blázquez, consejero de Economía, es el que más directivos ha perdido. De los ocho con que comenzó la legislatura, ya sólo le quedan tres. De hecho tuvo que efectuar grandes remodelaciones a consecuencia de los ceses. Antonio Beteta, consejero de Hacienda, ha cambiado cuatro altos cargos públicos, incluido el viceconsejero José Manuel Barberán, que se marchó "a petición propia". Luis Eduardo Cortés, máximo responsable de Obras Públicas, tiene mejor atados a sus altos cargos. De los siete con que comenzó la legislatura, todos siguen en sus puestos.

La última gran dimisión de un puesto de responsabilidad política en la Comunidad de Madrid acaeció el pasado julio. El director de la Agencia Antidroga, Alejandro Martín Carrero, dejó su cargo porque se sentía "abandonado por todos". El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, reconoció después que Martín Carrero había dejado el cargo "a petición propia".