La fuerza de la solidaridad

Lo que no consiguieron ni los gobiernos ni las administraciones lo consiguió la fuerza de la solidaridad. La antigua residencia del Perpetuo Socorro, de Badajoz, llevaba cerrada diez años, los tres últimos en obras. Durante mucho tiempo, explicó ayer Juan Pérez Miranda, el director del complejo hospitalario Infanta Cristina, del que depende, se estuvo planeando su reapertura y buscando fondos para su reforma. El jueves, sin embargo, el hacer frente a la desgracia de las víctimas de las riadas no podía esperar. Políticos, profesionales y ciudadanos anónimos echaron a andar sin aguardar ni un minuto. "En poco más de tres horas se puso en funcionamiento un centro que estaba sin agua, sin luz y sin calefacción", resaltó Pérez Miranda a la agencia Efe.El olvidado recinto sanitario, en su día el más grande de la ciudad, recobró su espíritu a la carrera para atender las necesidades más perentorias, las del alojamiento y la comida, de 280 personas desvalidas que habían tenido que evacuar con la mayor de las urgencias su barrio, Cerro de Reyes. Sus cuatro plantas, capaces, según Pérez Miranda, para albergar a 400, se habían convertido en un cálido refugio.

Hace falta dinero

Las ayudas se han volcado. Tanto, que el propio delegado del Gobierno en Extremadura, Óscar Baselga, tras agradecerlas públicamente, advirtió ayer que no es necesario que se envíen más alimentos y objetos de primera necesidad porque hay suficientes e incluso podrían crearse "problemas de almacenamiento". No obstante, recordó, las diferentes cuentas bancarias (véase gráfico adjunto) que se han abierto para hacer donativos a los damnificados.La Cruz Roja, a través del responsable de socorro y emergencia de su Oficina Central, Antonio Fernández Vicente, también insistió en el extremo económico porque, a su entender, lo que verdaderamente necesitan ahora las familias afectadas, obreras en su inmensa mayoría, es dinero para atender los gastos extraordinarios que les han llovido.

El apoyo se extiende a otros aspectos materiales. Así, empresarios de la construcción de la propia comunidad extremeña han decidido efectuar gratuitamente tareas de limpieza y pequeñas obras de fábrica en la red de carreteras, informa Europa Press, en respuesta a la petición realizada al efecto por el consejero de Obras Públicas, Javier Corominas, cuyo departamento coordinará los múltiples trabajos a realizar para que todo vuelva a la normalidad.

Otro ejemplo lo protagoniza una empresa de Talavera de la Reina (Toledo), que ha preferido mantenerse en el anonimato porque su deseo no es el de hacerse publicidad a costa de una tragedia, al ofrecerse a reparar de forma desinteresada todos los motores eléctricos destinados a bombear agua a los edificios que hayan resultado dañados como consecuencia de las inundaciones.