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Liaño imputa el secuestro de Iglesias a los etarras que capturaron a Ortega

El juez Javier Gómez de Liaño procesó ayer a los integrantes del comando Gohierri de ETA (Jesús María Uribetxeberria Bolinaga, Javier Ugarte Villar, José Luis Eróstegui Bidaguren y José Miguel Gaztelu Otxandorena), así como al dirigente etarra Julián Atxurra Egurola, Pototo, como autores e inductor, respectivamente, del secuestro del industrial guipuzcoano Julio Iglesias Zamora durante 140 días en 1993.

Los cinco miembros de ETA ya están procesados por el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara. Los integrantes del comando Gohierri fueron detenidos, precisamente, a raíz de la liberación de Ortega Lara en una nave industrial de Mondragón (Guipúzcoa).Iglesias Zamora declaró ante el juez esta semana, cuatro años después de su secuestro, pero afirmó que no podría reconocer a sus secuestradores y que el zulo en el que estuvo encerrado le pareció algo más pequeño que el hallado durante el rescate de Ortega Lara.

No obstante, Gómez de Liaño ha decidido procesar a los cinco etarras basándose en que es incuestionable el secuestro de Iglesias y el hallazgo del zulo y en que Gaztelu, Eróstegui y Uribetxeberria reconocieron su participación en este delito, en el que implicaron también a Ugarte y Pototo.

Atxurra se encuentra actualmente encarcelado en Francia, pero el juez anticipa su propósito de instar su extradición, si el fiscal lo solicita.

Respecto a los otros cuatro, Gómez de Liaño anuncia que, aunque todos están en prisiones españolas por otras causas, cuando les notifique personalmente el procesamiento y antes de tomarles declaración indagatoria, celebrará vista para decretar también su prisión por estos hechos. El magistrado ha requerido a los etarras 30 millones de pesetas para hacer frente a la responsabilidad civil que pueda declararse.

Un grupo para secuestros

Según el auto de procesamiento, Uribetxeberria, Ugarte, Eróstegui y Gaztelu, que pertenecían a ETA desde 1-983, alquilaron en 1987 una nave en Mondragón para fabricar repuestos. En el verano de 1988, siguiendo instrucciones de la dirección de ETA, excavaron un zulo de cinco metros cuadrados en el suelo de la nave con el fin de guardar armas y explosivos para los comandos que actuaban en la zona de Mondragón y Vergara.Los cuatro etarras formaron un comando de apoyo, denominado Gohierri, cuyo responsable en la organización era el dirigente Joseba Arregui Erostarbe, Fitti. Tras la detención de la cúpula de ETA en Bidart, en 1992, se hizo cargo del comando el dirigente Julián Atxurra, quien les indicó que el zulo debía cambiar de función para destinarlo a ocultar a personas secuestradas.

Los integrantes del comando insonorizaron el zulo y lo recubrieron de plástico para evitar la humedad que se filtraba del río Deva. Después, vigilaron a varios empresarios, entre los que figuraba Angel Iglesias, pero ante las dificultades que presentaba su secuestro decidieron capturar a su sobrino Julio Iglesias.

El secuestro se produjo el 5 de julio de 1993. Eróstegui y Uribetxeberria abordaron a Iglesias cuando éste se bajaba de su coche. Tras drogarlo y atarlo, lo llevaron en un turismo hasta el barrio de Añorga, en San Sebastián, donde lo introdujeron primero en el maletero de un coche y luego en el hueco fabricado en la carga de un camión. Iglesias fue trasladado al zulo donde permaneció hasta el 29 de octubre de 1993, cuando fue liberado en el alto de Arrate (Guipúzcoa).

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