Excepción durante una visita grata
Visité Madrid en verano y mi impresión de todo lo que vi fue bastante grata, exceptuando el Museo de Cera de la ciudad.Resumiendo la experiencia. Pago 900 pesetas de la entrada (precio bastante caro). En la primera sala te das cuenta de que si no tienes un folleto explicativo no sabes de qué personaje se trata.
No tienes más remedio que comprar un libro explicativo del museo (pago 300 pesetas más).
El trato del personal hacia los visitantes ante la queja generalizada por no facilitar una guía gratuita es simplemente chulesco. La mayoría de las salas tiene una iluminación pésima, perdiéndose muchos detalles de las figuras. La sala del terror da risa, por el montaje tan desastroso y obsoleto. Y lo más lamentable para mí es que el parecido de muchos personajes representados allí es totalmente inexistente (véase a Paul Newman, Butragueño, Romay, Clint Eastwood y un largo etcétera).
Por último, nadie me supo decir qué hace Jesús Hermida montando en el tiovivo de los payasos de la tele...
Todos los que visitamos el museo esa tarde calificamos el mismo de auténtica tomadura de pelo.-
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