Javier Arenas: "EI fin no lo justifica todo"

En el PP y en el Gobierno hubo ayer reacciones muy dispares sobre el informe del Tribunal de Cuentas de la Expo 92. El ministro de Trabajo, Javier Arenas, cauteloso, situó el debate en el Parlamento -el PP aún no ha decidido pedir una comisión de investigación-, y una vez, dijo, que se conozca en profundidad el estudio. Otros dirigentes populares, en cambio, insistían en reclamar al PSOE que devuelva "todo el dinero que se llevó".

Arenas se midió. El ministro recordó al PSOE, eso sí, que el fin de la Expo 92 "no lo justifica todo", y reprochó a los Gobiernos presididos por Felipe González que debían haber respetado más los métodos: "Hemos vivido unos años en los que las grandes celebraciones han obsesionado a determinados Gobiernos, y hay que ser respetuosos no sólo con los fines, sino también con las normas y los procedimientos".

No fue tan prudente, ni con mucho, el portavoz del PP en Andalucía. Manuel Atencia, sin conocer el informe, lo tildó como "demoledor", y a continuación denunció los "graves indicios de corrupción" observados, según él, en esa auditoría. Exigió incluso a los socialistas que "devuelvan todo el dinero que se llevaron", en línea con la precipitada intervención, el viernes, del, portavoz adjunto del PP en el Congreso, Ramón Aguirre.

El coordinador de comisiones del PP en el Congreso, Rafael Hernando, tampoco se frenó. Acusó al PSOE de estar inmerso en un proceso de "parálisis cerebral" y añadió que el portavoz parlamentario socialista, Juan Manuel Eguiagaray, se describe a sí mismo cuando habla de los populares como "gusanos" que buscan "podredumbre".

El diputado del PP Andrés Ollero calificó de "ininteligible" la posición expuesta la noche del viernes por la presidenta del Tribunal sobre las pérdidas de la Expo, luego aventuró que éstas son el triple que las declaradas, y al final acusó al PSOE de haber promocionado una "curiosa fluidez de paso" de funcionarios entre "el Tribunal de Cuentas a la Expo, y viceversa".