Interior cambiará a varios jefes de la cúpula policial antiterrorista en busca de más éxitos contra ETA

El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, no está satisfecho con los resultados obtenidos por el Cuerpo Nacional de Policía en la lucha contra ETA, en contraste con los éxitos logrados por la Guardia Civil. El director general de la Policía, Juan Cotino,. está ultimando una remodelación en los servicios antiterroristas apenas 15 meses después de que la actual cúpula policial tomara posesión de sus cargos. El máximo jefe de estos servicios, el comisario general de Información Jesús de la Morena Bonilla, continuará en su puesto, pero no así varios de sus más estrechos colaboradores, según fuentes policiales.

El secuestro y posterior asesinato de Miguel Ángel Blanco, concejal del PP en el Ayuntamiento de Ermua (Vizcaya), ha sido el detonante que ha hecho que el ministro del Interior haya ordenado una remodelación de los servicios antiterroristas. En e,,ocasión, la policía no obtuvo ninguna pista de los activistas de ETA que perpetraron aquella acción que despertó una amplia reacción ciudadana en toda España.

La detención de Fernando Elejalde Tapia, minutos después de que presuntamente asesinara en San Sebastián al funcionario de prisiones Francisco Gómez Elósegui, y la captura en Bilbao de Oscar Barreras Díaz, apenas unas horas después de que el pasado abril participara supuestamente en la muerte del inspector jefe de policía Luis, Andrés Samperio Sañudo son los mayores éxitos obtenidos por la policía durante el actual Gobierno del PP. Con ser importantes, el responsable, de Interior considera que no suponen un balance satisfactorio.

El comando Madrid de ETA es otra dé las importantes asignaturas pendientes. Durante los últimos tueses del año pasado y los primeros del presente fueron descubiertos cinco pisos francos utilizados por este grupo terrorista, pero la policía no logró en ningún caso detener a sus ocupantes. Sólo uno de sus presuntos colaboradores, el alemán Fritz Gary Siemund, fue arrestado en su país después de que se produjera una explosión fortuita en uno de los pisos que el comando tenía en la calle de Polibea, de Madrid, donde se hallaron numerosas armas, explosivos y material para fabricar bombas.

La Guardia Civil, sin embargo, ha obtenido éxitos como la captura del comando Galicia y, sobre todo, la liberación del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara y la detención de los etarras que le sometieron a un largo cautiverio en un húmedo agujero de Mondragón.

Medios de Interior han reconocido que la Dirección General de la Policía está barajando una serie de cambios en la escala de mando de los servicios antiterroristas "con la lógica intención de obtener mayor eficacia contra ETA". Es probable que esta semana o la próxima se lleve a cabo esta remodelación, cuya amplitud y alcance no están todavía ultimados.

Relevos en la cúspide

No obstante, fuentes policiales dan por seguro que habrá relevos en el Servicio de Información Interior, piedra angular de la lucha antiterrorista, a cuyo frente está actualmente el comisario Enrique Díaz. Esta unidad es la encargada de combatir el terrorismo autóctono -fundamentalmente ETA y GRAPO- el golpismo e involucionismo, las sectas destructivas y otros movimientos sociales que conlleven algún riesgo para la seguridad del Estado.

Los comisarios Juan Zorzo y José María García, responsables de las dos grandes áreas en que está dividido el departamento de Información Interior, también serán probablemente cambiados de puesto. Por el momento no se conocen los nombres de las personas que se harán cargo de la cúpula antiterrorista.

Otro de los probables relevos afecta a la jefatura de la Brigada de Información de Madrid, cargo para el que se perfila Daniel Santos, actual responsable de la comisaría del aeropuerto de Madrid-Barajas, que con anterioridad trabajó en la Brigada Judicial y en los servicios de inteligencia.

En medios policiales se baraja la posibilidad de que la remodelación afecte también a las unidades del País Vasco, cuyo máximo responsable es Juan Carretero en calidad de jefe superior de Policía de Bilbao. Pero fuentes del ministerio del Interior aseguran que todavía no hay nada decidido. Carretero sucedió en el cargo hace unos meses a Juan, Bautista Felices.

Según fuentes policiales, las relaciones con la Ertzaintza (policía autónoma vasca) son "frías" y sigue habiendo una gran descoordinación entre los cuerpos de seguridad que operan en el País Vasco. Esta frialdad no sólo afecta a los agentes antiETA, sino que se extiende a las relaciones entre el ministro Jaime Mayor Oreja y el consejero vasco de Interior, Juan María Atutxa, pese a que públicamente ambos mantienen lo contrario.

"Es innegable que lo resultados en la lucha contra ETA no son buenos", reconoció un mando policial, "y que en el cuerpo no estamos contentos".