El Consejo de RTVE vota la destitución de Luis Herrero como conductor de debates

El Consejo de Administración de RTVE propuso ayer al director general, Fernando López-Amor, el relevo de Luis Herrero como conductor de los debates programados por La Primera para los martes. Hubo siete votos a favor de dicho acuerdo -los representantes del PSOE, CiU, IU y el consejero de consenso entre PP y PSOE, Andrés de Blas- y sólo votaron en contra los dos del PP y el propio director general, López Amor. Este último, que no anticipó cómo responderá a ese acuerdo, se comprometió, en cambio, a mantener en catalán las retransmisiones deportivas que viene realizando el centro de Sant Cugat para el circuito de TVE en Cataluña desde hace muchos años, y que últimamente han sido interrumpidas.

La mayoría del consejo entendió que tales peticiones eran pertinentes para cumplir con los principios exigidos por el Estatuto de RTVE, que son los de "objetividad, veracidad e imparcialidad" y de respeto al pluralismo.Luis Herrero, periodista de la COPE, ha conducido varios programas marcados por la polémica. En el del pasado día 7, uno de sus compañeros de la COPE, José María García, arremetió contra el Grupo PRISA sin que estuviera presente persona alguna del mismo, en un espacio programado para hablar de fútbol y al que asistía el secretario de Estado para el Deporte, Pedro Antonio Martín Marín. Dos de los participantes, el médico y ex deportista Juan Antonio Corbalán y el escritor Manuel Hidalgo -este último, colaborador de El Mundo- protestaron en antena por el sesgo que se había imprimido al espacio.

La realización de este programa suscitó una queja por parte de Antonio Santillana, uno de los representantes del PSOE. Pero antes de que el consejo tuviera tiempo de examinarla se produjo otra edición de la serie de Herrero. Fue el martes pasado, y en ella el también periodista de la COPE, Federico Jiménez Losantos, arremetió contra los nacionalismos y arrancó fuertes aplausos entre el público presente en el estudio. La escena se produjo en una discusión con el escritor Baltasar Porcel, sin que nadie explicara los criterios de selección de dicho público, ni los de las personas escogidas para preguntar a los invitados.

Ese programa provocó una protesta del presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol. Uno de los consejeros que votaron ayer a favor de la destitución de Herrero fue el representante de CiU, Josep Maria Gené, quien también expresó la abstención del consejero del PNV, ausente del debate y que había delegado su voto en aquél. La votación efectuada sobre Herrero se produjo a propuesta formal del representante de IU, Rodolfo Ruiz Ligero.

Diego Carcedo, uno de los representantes socialistas, enfatiza, además, que los debates ni siquiera se hacen en directo: son grabados, para que Herrero pueda hacerlos compatibles con su programa en directo en la COPE. Para hoy está convocado otro.

El favor de la audiencia no ha acompañado hasta ahora a este espacio de corte político, aunque bien es cierto que tampoco gozan del favor del público la mayoría de las ofertas de entretenimiento -sean concursos, telenovelas o espectáculos musicales- introducidas por el actual equipo directivo de TVE.

Televisión Española sigue siendo la cadena más vista en lo que va de octubre, uno de los más competitivos del año, gracias al buen funcionamiento de sus programas clásicos: ¿Quién sabe dónde?, Hostal Royal Manzanares, Qué apostamosI y los Telediarios, que se mantienen a la cabeza de la audiencia de espacios informativos de las televisiones; así como los partidos de fútbol internacional.

Pero las nuevas ofertas introducidas por el equipo de López-Amor han calado poco. La Primera registró el martes pasado, en el horario de máxima audiencia, uno de los peores datos de su historia. Carlos Herrera y Luis Herrero consiguieron una media del 9,2% y del 9,5%, respectivamente, del total de los espectadores que tenían encendidos los televisores en sus respectivos horarios.

Tampoco ha comenzado con buen pie Buscados con cargo (TVE-1, jueves) que produce la empresa de Paco Lobatón, Red-Acción 7. En las últimas emisiones ha atraído a poco más de un millón de seguidores. Risas y estrellas, el musical creado por José Luis Moreno, es abrumadoramente superado por el debate de Tele 5 Moros y cristianos y por Sorpresa, ¡sorpresa!, en Antena 3.

En La 2, tanto la periodista Isabel San Sebastián, de Abc, como el polifacético Pedro Ruiz han dado audiencias por debajo de la media de esa cadena, que en la primera mitad del mes se acercó al 9%. López-Amor ha acertado, en cambio, con La botica de la abuela, programa que ofrece de lunes a viernes remedios caseros en La Primera.

Por otra parte, EL PAÍS recibió anoche un buen número de llamadas de espectadores enfadados porque la película Scaramouche, que estaba prevista en La 2, fue sustituida en el último momento por unos documentales no anunciados. Ese cambio se produjo en paralelo con otro en La Primera, que alteró su programación para introducir un debate acerca de Pilar Miró, la directora de cine fallecida el domingo pasado. La totalidad del Consejo de Administración de RTVE había acordado, horas antes, manifestar su hondo pesar por el fallecimiento de Pilar Miró.