La cafetería de 'La Peineta', cerrada desde hace cuatro meses, almacena suciedad y cucarachas
Los deportistas que acuden al estadio de la Comunidad de Madrid, La Peineta, si quieren tomarse un café o un refresco tienen que echar mano de la máquina automática o largarse al bar más cercano. La cafetería del estadio, que se abrió en septiembre de 1994 con el resto de las instalaciones, lleva más de cuatro meses cerrada, y según denuncia CC OO, la cocina se ha convertido en un lugar inmundo, pasto de la suciedad y las cucarachas. Para avalar la denuncia, el sindicato aporta una serie de fotografías tomadas en el interior del local que ilustran el grado de dejadez y porquería que alcanza el lugar. En una de ellas se aprecia una veintena de cucarachas andando por una bolsa de plástico. También se observan sartenes llenas de herrumbre colocadas en una cocina oxidada, cajas olvidadas y comida putrefacta.
100 millones de pesetas
El gerente de La Peineta, Santos Moraga, confirma esta situación. Y la explica: "La cafetería está en manos de una empresa concesionaria, Nudeh, SL, que debe a la Comunidad más de cien millones de pesetas y que ha incumplido las condiciones del contrato", añade Moraga.
El secretario general de Hostelería-Madrid de CC OO, Antonio Ruda, tiene más quejas: "Cinco trabajadores contratados por esta concesionaria han tenido que abandonar su puesto sin ninguna indemnización, y queda una sexta en una posición delicada. Si la Comunidad otorga la concesión a otra firma, debería readmitirla".
El gerente de La Peineta sostiene que no todo es tan fácil: "Ya hemos puesto el asunto en manos del juez' que es el que tiene que darnos permiso para Poder rescindir el contrato con Nudeh, SL, y así contratar a otra concesionaria. Pero, por ahora, no se adelanta mucho".
El agujero no es de ahora. En junio de 1996, el consejero de Economía, Antonio Beteta, ya reconoció que Nudeh, SL, debía ese dinero a la Comunidad. Y lo que es peor: que no se tenían muchas esperanzas de llegar a cobrarlo nunca. "Es de dudoso cobro", manifestó entonces.
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