La afición, enloquecida por la división

Los españoles ya estaban confusos con lo que estaba ocurriendo con la televisión, pero los acontecimientos del miércoles por la noche marcaron la transición a la completa casa de locos.Todo comenzó tras el inicio del partido de Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Oporto. La centralita de la cadena estatal de televisión TVE se vió bloqueada por un torrente de llamadas de furiosos espectadores de distintas zonas de la capital y barrios de los alrededores, que recibían el comentario equivocado, las imágenes equivocadas, o los comentarios o las imágenes, pero no ambos a la vez. El fiasco era un subproducto de la guerra entre las dos plataformas de televisión de pago digitales españolas.

La pelea legal sobre cuál tiene los derechos de pago por visión para los partidos domésticos españoles ha alcanzado un punto tal que ninguna de las dos los está emitiendo. TVE (...) planeó, inicialmente, dar el partido Oporto-Real Madrid a los abonados de su nueva plataforma digital, Vía Digital, como ayuda para conseguir suscripciones.

Pero hubo protestas y el Gobierno, que había defendido el principio de que los grandes eventos deportivos no debían ser monopolizados por cadenas de televisión de pago, se echó para atrás. (...) Afortunadamente, el Real Madrid derrotó a los portugueses por 2-0. Si no, nadie puede saber lo que habría ocurrido.

3 de octubre