El complejo industrial AVIC abre la reforma en China con 150.000 despidos

El conglomerado aeronáutico e industrial chino AVIC (Aviation Industries of China) va a reducir su plantilla en 150.000 asalariados hasta el año 2000, el 23% de los 650.000 que la componen ahora, con el objetivo de mejorar su competitividad. Se trata del primer plan de ajuste masivo desde la aprobación en el XV Congreso del Partido Comunista Chino, hace dos semanas, de un programa de reformas de las empresas públicas deficitarias.

La reestructuración debe reducir la plantilla del grupo a 500.000 trabajadores en el año 2000, mientras que el personal directamente empleado en la producción aeronáutica no debe sobrepasar las 200.000 personas, según anunció ayer el periódico China Daily.La información fue confirmada por la dirección a través de un comunicado, en el que se calificó la decisión como "una medida estratégica". El texto añade que "AVIC todavía no ha afrontado una reestructuración conforme a la economía de mercado". Asimismo, la dirección se ha comprometido a tomar las medidas necesarias para que no haya despidos a secas.

"El personal sobrante no será abandonado a su suerte", ha manifestado Ren Weil, uno de los responsables de la compañía citados por el diario. "AVIC canalizará parte de la plantilla hacia el sector terciario y a otras producciones civiles, que deberán crear suficientes empleos para absorber la mano de obra excedente", añadió el mismo portavoz.

AVIC, antiguo ministerio encargado de la aeronáutica militar, reagrupa ahora a un gran número de sociedades industriales en todos los sectores, algunas con participación de capital extranjero.

Durante el XV Congreso del Partido Comunista, el número uno, Jiang Zemin, reconoció que las reformas que emprenderá China van a estar inevitablemente acompañadas de dificultades sociales. E hizo un llamamiento a los 113 millones de empleados del sector público para que "cambien su mentalidad".

El primer ministro Li Peng, en el discurso pronunciado con ocasión de la fiesta nacional, el pasado 1 de octubre, reconoció también. que el futuro será "difícil" para los trabajadores chinos. "A causa del reajuste estructural de nuestra economía y de los nuevos avances de la reforma de las empresas del Estado, va a ser difícil para los obreros despedidos encontrar un nuevo trabajo", afirmó.

En privado, responsables del Ministerio de Trabajo han reconocido que la tasa real de paro en China se sitúa entre el 20% y el 30% de la población activa. En el sector del carbón, 150.000 mineros han sido ya despedidos durante el primer semestre de este año, lo que ha permitido que en las 93 principales minas del Estado se hayan conseguido beneficios netos por primera vez, tras muchos años de déficits.

Li Peng reconoció también que la alteración del orden público puede ser una situación "indeseable" en ciertas zonas del país, dando a entender la existencia de movimientos de protesta de una parte de los trabajadores despedidos.