El juzgado del 'caso KIO' reembarga bienes de De la Rosa

El juzgado número 3 de la Audiencia Nacional, que instruye el caso Torras-KIO, ha acordado el reembargo de los bienes de Javier de la Rosa, que habían sido embargados con anterioridad por el juzgado de instrucción número 1 de Barcelona en relación con el caso Grand Tibidabo.

Esta medida de reembargo la ha adoptado el juez Manuel García Castellón, titular accidental del juzgado número 3, mientras sustituía a la juez titular, Teresa Palacios. La petición. de esa medida ha sido planteada por los abogados del Grupo Torras-KIO, querellante contra De la Rosa por presuntos delitos de estafa y apropiación indebida por valor de más de 100.000 millones de pesetas.

Entre los bienes reembargados a De la Rosa por la Audiencia Nacional figuran un 21% del capital de Grand Tibidabo, el lujoso yate Blue Legend y varios vehículos como unas motocicletas Bultaco y Yamaha, un Seat Panda, un Honda y un Austin.

En esta relación no figura el automóvil Audi con el que actualmente realiza sus desplazamientos por Barcelona. El juez pide que se notifique "al acusado Javier de la Rosa el reembargo de todos los bienes embargados por ese juzgado".

La decisión de la Audiencia Nacional supone el bloqueo de las negociaciones entre De la Rosa y los nuevos gestores de Grand Tibidabo, afines al financiero, para la amortización de sus deudas con esa sociedad.

Esto se debe a que aún cuando el juez encargado del caso Tibidabo, Joaquín Aguirre, aceptase levantar el embargo de los bienes de De la Rosa, éstos quedarían inmediatamente afectados por el nuevo reembargo. Precisamente, la empresa ha presentado un expediente de regulación de empleo de los 170 empleados del parque de atracciones que gestiona en Barcelona.Declaración de Lacalle

Por otra parte, hoy declarará en el mismo Juzgado, al que ya se ha reincorporado la juez Palacios, el actual delegado del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona, Enrique Lacalle. El dirigente del PP catalán prestará testimonio en calidad de imputado sobre sus relaciones financieras con De la Rosa.

Lacalle reconoció públicamente haber recibido dinero del financiero, tras publicarse varias cartas en las que reconocía las entregas y mostraba su agradecimiento a De la Rosa. Las cartas conocidas se refieran a los años 1989 y 1991.

Al destaparse el caso, Enrique Lacalle rechazó cualquier posibilidad de presentar su dimisión, con el argumento de que "todos los partidos han pasado el platillo". De la Rosa debía haber declarado ayer en la Audiencia sobre este mismo asunto, pero su comparecencia fue finalmente aplazada.