El crédito a empresas y familias aumentó 12,3% en los últimos 12 meses

El crédito interno a empresas y familias creció un 18,6% en el pasado mes de agosto en tasa intermensual anualizada, con lo que la tasa internanual (en los últimos 12 meses) se situó en el 12,3%, según datos hechos públicos ayer por el Banco de España.Estas cifras subrayan el buen comportamiento del consumo después de la subida de julio, con un aumento del 11,2%, y contrastan abiertamente con el 3,8% alcanzado en el mes de agosto de 1996, y vienen a corroborar el despertar económico que había adelantado el aumento del 4,2% en el gasto medio por hogar durante el segundo trimestre, el crecimiento más elevado desde mediados de 1990.

El crédito interno alas Administraciones públicas, por su parte, registró un crecimiento interanual del 3%, aunque la financiación total captada por el Tesoro -que incluye además la cartera en firme de deuda a medio y largo plazo del público residente y no residente, así como los créditos directos exteriores- registró un crecimiento interanual del 9% en el pasado mes.

Crecimiento de los ALP

El crecimiento de los activos líquidos en manos del público (ALP) en agosto, sin embargo, no detecta graves tensiones que puedan poner en peligro la evolución de la inflación. Los ALP subieron un 8,7% en el pasado mes en tasa intermensual anualizada, con lo que la tasa interanual (de los últimos 12 meses) se sitúa en el 6%. El Banco de España considera, a este respecto, que "estas cifras evidencian el mantenimiento durante el mes de agosto de un cierto dinamismo... en relación a su evolución en la primera mitad del año"..

El banco emisor subraya que en esta ocasión este mayor dinamismo se ha debido al carácter más expansivo de los valores del Estado incluidos en este agregado. Así, en agosto, el conjunto de valores públicos registró una variación neta positiva de 483.000 millones.

Por su parte, los depósitos y otros activos líquidos bancarios tuvieron ritmos negativos de crecimiento, al registrar un descenso del 1,1 % en tasa intermensual anualizada y un crecimiento interanual prácticamente nulo (0,2%). Los bancos vieron reducirse sus depósitos un 10% mientras que los de las cajas de ahorro crecieron un 5,7%.