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El cardenal Ratzinger afirma que la madre Teresa de Calcuta será santa "rápidamente"

100.000 personas han visitado ya la capilla donde reposan sus restos

El cardenal Ratzinger aseguró ayer que Teresa de Calcuta será santa "rápidamente". Por su capilla ardiente han pasado desde el pasado domingo más de 100.000 personas. Precisamente, la gran afluencia de gente y la temperatura del recinto preocupan a los expertos por sus efectos en la conservación del cadáver. La reina Sofía presidirá la delegación española en el fúneral de la religiosa, que tendrá lugar el próximo sábado en un estadio de Calcuta. También ha anunciado su presencia Fabiola de Bélgica. En el sepelio se disapararán tres salvas de honor.

Mantener en buen estado los restos embalsamados de la madre Teresa hasta su inhumación el sábado es una de las mayores preocupaciones de los expertos en estos momentos. La humedad de Calcuta, con lluvias ininterrumpidas desde hace días, hizo que ya el pasado lunes se suspendieran por tres horas las visitas para que médicos y forenses examinaran el estado del cadáver. "No existe riesgo de descomposición del cadáver", aseguró la portavoz de las Misioneras de la Caridad, Sunita Kurnar.Finalmente los expertos han decidido quitar la urna de cristal que protege los restos de la religiosa y refrigerar el recinto, en la iglesia de Santo Tomás. "Los médicos están constantemente examinando el cuerpo y lo encuentran más o menos bien", explicó Francis Gomes, vicario general de archidiócesis de Calcuta.

"Vida resplandeciente"

Tras el funeral con honores de jefe de Estado, que tendrá lugar el próximo sábado en un estadio y al que asistirá la reina Sofía, empieza un proceso de s miificación que promete ser más ágil que en otros casos. El propio cardenal Joseph Ratzinger, el máximo responsable vaticano para la doctrina, aseguró ayer que Teresa de Calcuta, fallecida el pasado viernes a los 87 años a causa de un ataque de corazón, será santa en breve espacio de tiempo, informa . No será por el procedimiento de aclamación -no utilizado por el Vaticano desde 1588-, "pero en el caso de madre Teresa, el proceso ordinario se desarrollará rapidamente", explicó. El cardenal agregó que en un proceso de beatificación hay que evaluar todos los aspectos de una vida, si bien matizó que "en el caso de la madre Teresa, su vida fue tan resplandeciente que no será un largo proceso".

La ciudad de Calcuta sigue mostrando su afecto por la religiosa que basó allí toda su vida y su obra social. Uno de los grandes hospitales especializado en el tratamiento de la tuberculosis, será rebautizado como Teresa memorial Hospital, según informó ayer el alcalde de la ciudad.

Las muestras de condolencia se producen por todo el mundo. Unos 300 mensajes se han recibido por Internet en la dirección recién habilitada (http://www.indiachat.net/ motherteresa). Está previsto que todos ellos sean remitidos posteriormente a la sede de las Misioneras de la Caridad.

El funeral preparado para la religiosa, con los máximos honores previstos para un civil en la India, no ha estado exento de alguna polémica por parte de aquellos que piensan que hubiera disgustado a la propia madre Teresa. Un anciano consejero espiritual de la religiosa ha afirmado que ella no habría querido esta "agitación".

El propio arzobispo de Calcuta ha salido al paso. "Ella lo habría autorizado por los pobres", declaró ayer en conferencia de prensa. En el mismo sentido, una portavoz de las Misioneras de la Caridad ha manifestado el agradecimiento de la orden "porque la nación india haya tomado la decisión sin precedentes de ofrecer un funeral de Estado a la madre Teresa. Es un tremendo honor para todos nosotros".

Estadio

Alrededor de una cincuentena de mendigos, huérfanos y leprosos, representantes de los colectivos que atendió la madre Teresa, formarán el cortejo funebre tras el armón de artillería que conducirá su cadáver hasta el estadio donde se oficiará el funeral.

En lugar de las 21 salvas del saludo tradicional, se dispararán sólo tres a cargo de 12 militares, en el funeral organizado por las autoridades indias, según los detalles facilitados sobre el protocolo del sepelio. Bill Canny, portavoz de la Madre Teresa, defendió esta liturgia con cierto tinte militar y se mostró convencido de que la retransmisión del evento atrerá la atención del mundo hacia los desposeídos a quienes dedicó su vida la religiosa difunta.

Además de la presencia de la reina Sofía y la esposa del presidente de los Estados Unidos, Hillary Clinton, estará presente en el sepelio Fabiola de Bélgica. Entre las ausencias se destaca la del papa Juan Pablo II, atribuida a la preparación de su próximo viaje a Brasil en octubre.

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