Volskwagen califica de "históricos" los resultados de Seat

El comité ejecutivo del grupo alemán Volskwagen (VW) calificó ayer de "históricos" los resultados de Seat, su filial automovilística española, en los ocho primeros meses del presente año.En una conferencia de prensa convocada con motivo de la inauguración del Salón del Automóvil de Francfort, Robert Bucellhofer, encargado del área de ventas del Comité Ejecutivo, apuntó que entre los meses de enero y agosto pasado, la marca española vendió 268.000 unidades en todo el mundo. Esta cifra supone un aumento del 12,2% sobre el mismo periodo del año 1996. La mayor parte de las ventas se han dirigido al continente europeo. El directivo de VW añadió que las ventas de Seat en el mercado alemán crecieron hasta final de agosto en 7,5% y un 17,5% en el mercado español.

Nivel de rentabilidad

Ferdinand Piëch, presidente de Volskwagen, se sumó a los parabienes dados a la firma española y añadió que el modelo Arosa de la Firma Seat que se fabrica en la planta germana de Wolfsburg, "seguirá siendo por algún tiempo la única representación del consorcio en este segmento de vehículos pequeños urbanos". Piëch señaló, además, que la marca española se está acercando al nivel de rentabilidad del 6,5% que había cifrado el grupo de aquí al año 2000.

El año 1997 se pueden considerar como un "año especial para la Firma alemana" al conseguir una ventas en todo el mundo de 2.923.000 unidades, con un incremento cercano al 10% sobre el año anterior. Los aumentos más importantes se han producido en los mercados de América del Sur, Asia y Europa oriental. Las cuatro marcas del grupo (Volskwagen, Audi, Seat y Skoda) han logrado un nivel de penetración en el mercado mundial del 10%.

Por su parte, el presidente del grupo PSA (integrado por las marcas Citroën y Peugeot) Jacques Calvet, anunció que el grupo mantendrá su actual estructura en el futuro, incluso tras su retirada de la presidencia y ambas marcas serán operativamente independientes.

Durante la inauguración del Salón de Francfort, Calvet eludió despejar dudas sobre el momento de su retirada del cargo y se limitó a señalar que "aunque todo es posible, si las cosas no cambian estaré en el próximo Salón de Bruselas" a finales del presente año. Calvet reiteró su postura contraria a la libre presencia de fabricantes japoneses y coreanos en el mercado europeo.

En este sentido, mostró confianza en que el acuerdo alcanzado en el año 1991, que establecía contingentes sucesivos para los automóviles japoneses en la Unión Europea, sea prorrogado. Japón tendrá acceso al libre mercado europeo sin límite de producción en el año 2000.