El nuevo líder de Camboya se niega a que Sihanuk abandone el trono

El rey Norodom Sihanuk declaró ayer que el actual hombre fuerte de Camboya, el segundo primer ministro, Hun Sen, no ha aceptado su oferta de abdicar del trono. El monarca instó al dirigente camboyano a poner fin a la violencia y luchar en favor de la reconciliación del empobrecido país del su reste asiático. El llamamiento de Sihanuk se produjo mientras los soldados leales a Hun Sen, que se hizo con el poder tras un golpe de Estado el mes pasado, estrechaban el cerco sobre el último bastión de las fuerzas realistas del de puesto coprimer ministro e hijo del monarca, el príncipe Norodom Ranariddh, cerca de la frontera con Tailandia.

Sihanuk se entrevistó el pasado martes en Pekín, donde se encuentra sometido a tratamiento médico desde hace seis meses, con Hun Sen y el nuevo coprimer ministro, Ung Huot, y el actual jefe de Estado en funciones, Chea Sim. Los analistas creen que la oferta de abdicar podría significar que el monarca no quiere implicarse en el giro que ha tomado la crisis camboyana. Otros observadores apuntan que Hun Sen teme que con ese gesto Sihanuk esconda el deseo de volver a la arena política y desafiar su poder.

La delegación oficial camboyana se congratuló de la decisión del rey de regresar a Camboya tan pronto como sea posible. Sihanuk dijo ayer que su retorno se producirá antes de fin de mes para participar en una ceremonia relegiosa en favor de la paz y la reconciliación. A pesar de haber recibido a Hun Sen, el monarca sigue sin dar su aprobación al nuevo poder político que se ha establecido en el país. Sin embargo, sus recomendaciones en favor de la paz, la reconciliación y el respeto de los derechos humanos hacen pensar que acepta la nueva realidad.