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El PNV apoya en un pueblo de Álava debatir una moción de HB

El Partido Nacionalista Vasco tendió ayer su mano a Herri Batasuna en el Ayuntamiento de Amurrio (Álava) para debatir una moción de apoyo a un preso de ETA natural de la localidad y encarcelado en Cartagena (Murcia). Veinte días después del asesinato de Miguel Ángel Blanco y de las impresionantes movilizaciones sociales contra la banda terrorista, el PNV se desmarcó del resto de las fuerzas políticas que rechazaron de manera taxativa tratar la moción.

"Es inconcebible después de todo lo que ha pasado en las últimas semanas que el PNV apoye meter por el procedimiento de urgencia una moción de HB", explicó molesto el alcalde de la localidad, Pablo Isasi, de Eusko Alkartasuna.HB intentó que el pleno que celebró ayer el Ayuntamiento de Amurrio, la tercera localidad de Álava, con cerca de 10.000 habitantes, debatiera sobre lo que supuestamente le ocurrió al preso de ETA Santos Berganza Zendegui en el centro penitenciario de Cartagena. Según HB, el pasado 21 de julio, mientras Berganza Zendegui se encontraba comiendo, a él y a otro interno de la banda terrorista les quemaron las celdas. La formación radical reclamó que su moción se incluyera en el orden del día, por lo que el alcalde Isasi abrió un turno entre los partidos para decidir al respecto.

El Ayuntamiento está formado por siete concejales de EA, tres del PNV y uno de HB, otro del PP y también uno del PSE. Los representantes socialista y popular se negaron a tratar la moción. El portavoz peneuvista mostró su conformidad con que se debatiera, mientras que el alcalde también rechazó de manera taxativa que se hablara sobre la propuesta de la coalición radical. De esta forma, el pleno obvió la moción.

Al término de la sesión plenaria, Isasi criticó con dureza la actitud de los representantes del PNV. El primer edil calificó está postura como "una falta de respeto a las decisiones que toma la ciudadanía de este pueblo". Según Isasi, el partido nacionalistas está actuando en Amurrio "con incongruencia y su actitud no se parece en nada a la actuación del PNV en el resto de municípios". Fuentes de la dirección alavesa del PNV se negaron ayer a comentar este hecho.

El desmarque del PNV vuelve a poner en entredicho las consignas de unidad que emanan del Pacto de Ajuria Enea y de las ejecutivas de los partidos, que se habían comprometido a no cooperar con Herri Batasuna en ninguna de sus propuestas. Según Isasi, la actitud peneuvista en Amurrio es contradictoria con aquellas localidades en las que está gobernando, "lo cual sólo tiene una explicación: donde no gobiernan las incongruencias son múltiples".

Pablo Isasi lleva una década al frente del Ayuntamiento alavés. Su tirón electoral se refleja en el hecho de que EA arrasa en los comicios locales mientras que los habitantes de Amurrio apuestan por otras formaciones en las elecciones autonómicas y generales. En las municipales de 1995, Isasi casi consiguió doblar en votos a su rival peneuvista y tener casi cuatro veces más votos que HB.

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