Madani niega haber pactado su libertad con el Gobierno argelino

En su primera declaración después de salir de la cárcel, el presidente del Frente Islámico de Salvación (FIS), Abasi Madani, afirmó ayer en Argel que no ha suscrito "contrato" alguno con las autoridades ni firmado un papel de compromiso. "Mi liberación se ha producido sin restricciones y sin condiciones", declaró Madani, quien después de sus más de cinco años de cautiverio apareció en buena forma fisica en su paseo por el popular barrio de Belcourt, a donde acudió a orar a la mezquita Kabul, de la que partían las manifestaciones organizadas por el FIS cuando era un partido legal.La prensa gubernamental de Argel, con El Moudjahid a la cabeza celebra la liberación el martes de Madani, tildándola de "gesto político" propio de un "Estado fuerte y tolerante". Los periódicos privados, en cambio, prefieren ahondar en el "precio" pagado por el número uno del movimiento islamista para lograr su excarcelación. Se basan en lo expresado por el tribunal militar de Blida, que aludía a una liberación condicional.

En cuanto a la posible liberación del número dos del FIS, Alí Benhadj, considerado el más duro, el periódico saudí Ascharq al Awsat, afirma que podría producirse "próximamente", dejando entrever la existencia de negociaciones a alto nivel actualmente en curso. Benhadj deberá comparecer de nuevo ante el tribunal militar de Blida, según Liberté, en relación con una carta de apoyo que envió al dirigente del GIA Cherif Gusmi, en 1995, posteriormente abatido en una operación antiterrorista por las fuerzas de seguridad.

El mismo día en que se producía la puesta en libertad de Madani, fuentes oficiales informaban que las elecciones comunales se celebrarán el 23 de octubre, decisión tomada por el presidente Liamin Zerual con los partidos que han aceptado acudir a los comicios.

Es difícil, aunque no está descartado, que el FIS vuelva a recobrar su legalidad y concurra a las elecciones. Según fuentes diplomáticas árabes, la idea del entorno del presidente Zerual sería la de facilitar un acuerdo entre el islamista moderado Mahfud Nahnah y el FIS o una parte del mismo. De cualquier manera, el fin de la violencia terrorista protagonizada en especial por el Grupo Islámico Armado y otros comandos difíciles de identificar está lejos, porque ninguno de los dirigentes históricos del FIS tiene suficiente ascendencia sobre las tropas de Antar Zuabri.