La dirección de la Unesco hace suyo el Fòrum Barcelona 2004

La dirección de la Unesco ha hecho definitivamente suyo el proyecto del Fòrum Universal de les Cultures Barcelona 2004. El director general de la organización, Federico Mayor Zaragoza, expresó ayer en París su decidido apoyo a la propuesta, se mostró confiado en que ésta sea aprobada por la asamblea general del próximo mes de octubre y planteó incluso su continuidad en el futuro con otras ciudades como escenario. El alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, y los máximos representantes del consistorio no podían regresar de la capital francesa, adonde acudieron para presentar oficialmente el proyecto, con mejores noticias.La delegación barcelonesa, encabezada por Maragall, estaba formada por los presidentes de los demás grupos municipales -Miquel Roca (CiU), Alberto Fernández Díaz (PP), Eulàlia Vintró (IC-EV) y Pilar Rahola (PI)-; el primer teniente de alcalde y virtual sucesor de Maragall al frente de la alcaldía, Joan Clos, y el coordinador municipal del Fòrum, Enric Truñó. Importante y significativa fue la presencia, también, del embajador español ante la Unesco, Jesús Ezquerra -el interlocutor designado por el Gobierno para este asunto-, y Carles Duarte, director general de Difusión del Departamento de Presidencia de la Generalitat.

Mayor Zaragoza, expresó ayer públicamente su apoyo al proyecto del Fòrum 2004 -que pretende convertir a Barcelona en escenario de un debate mundial sobre las culturas y la paz- y se manifestó confiado en que la propuesta sea aprobada ®por unanimidad¯ el próximo mes de octubre por la asamblea de la organización, de la que forman parte 185 países. Fuentes municipales informaron de que Mayor Zaragoza se manifestó durante la reunión partidario de que esta iniciativa tenga continuidad en años posteriores y que el testigo de Barcelona sea recogido por otras ciudades.

La facilidad con la que el Ayuntamiento de Barcelona está consiguiendo adhesiones para el Fòrum 2004 -además de la Unesco, el proyecto cuenta con el apoyo formal del Gobierno y de la Generalitat- no es ajena al hecho de que se plantea como un acontecimiento autofinanciable. Esto es, el Ayuntamiento de Barcelona propone, pero no pide dinero. Los problemas, en todo caso, empezarán a aparecer cuando llegue el momento de poner manos a la obra y buscar la financiación necesaria para cubrir el coste de la organización, calculado de forma orientativa en estos momentos en unos 120.000 millones de pesetas. Tanto el Gobierno como la Generalitat han dejado meridianamente claro que el marco presupuestario de los próximos años no permitirá gastos extraordinarios. En el gobierno municipal, sin embargo, se relativizan estas advertencias y se considera que este escenario puede variar de aquí a que tengan que empezar las primeras obras: en el 2001.

Más allá del propio interés del acontecimiento, el Ayuntamiento de Barcelona pretende que el Fòrum 2004 se erija en un nuevo vehículo para mantener la proyección internacional de la ciudad y en el catalizador para que se lleve a cabo una serie de infraestructuras ya comprometidas, pero cuya ejecución podría verse retrasada a causa de las actuales restricciones presupuestarias: la plataforma logística del Llobregat -con la ampliación del puerto y el aeropuerto-, el tren de alta velocidad y la regeneración del Besòs.