ETA reitera que los funcionarios de prisiones son su objetivo hasta que se acerque a los presos

Dos portavoces de ETA afirman en una entrevista publicada ayer en el diario Egin que hasta que no fue secuestrado Ortega Lara no se comenzó a hablar de los derechos de los presos, y anuncian a la vez que sólo dejarán de atentar contra los funcionarios de prisiones cuando se respeten estos derechos acercando a los presos a las cárceles del País Vasco. Los dos etarras que aparecen encapuchados en las abundantes fotos que ilustran las seis páginas que el rotativo dedica al tema reiteran sus últimos mensajes sin que se atisbe un mínimo cambio en sus duras posiciones.

Los dos miembros de ETA son contrarios a anunciar una tregua y "no ven otro camino que la lucha armada" para conseguir la autodeterminación de Euskadi. Reafirman la importancia de la lucha callejera y mantienen la vigencia de la estrategia de la desestabilización. Además, se muestran inquietos por el proceso abierto contra la Mesa Nacional de HB y advierten que encarcelar a la dirección abertzale "puede traer consecuencias nefastas para todos".Los portavoces etarras desvelan que el coche-bomba que pudo ser desactivado en Rentería (Guipúzcoa) hace poco más de dos meses estaba destinado a una patrulla de la Ertzaintza y no regatean críticas y el tono despectivo para el cuerpo policial vasco. "Los zipayos son enemigos por el odio que están extendiendo y el modelo de sociedad violenta que tratan de imponer", aclaran tras admitir que el atentado de Rentería "no se culminó como debía". Y añaden: "Más les valdría empezar a reinsertarse ya. Una vez solucionado el conflicto, los de ETA no tendremos problemas para encontrar nuestro lugar en la sociedad y un trabajo. Ellos sí que tendrán necesidad de una verdadera ayuda para reinsertarse".

Los entrevistados aseguran que los derechos de los presos no se respetan desde hace 20 años y, sin embargo, nunca se habían oído voces que defendieran la necesidad de hacerlo hasta que fue secuestrado Ortega. "Las muertes, las palizas, las huelgas de hambre, el silencio cómplice sobre los encierros, se empezaron a conocer cuando arrestamos a Ortega. Bienvenido sea, pero los derechos no se venden en rebajas. Se respetan o no se respetan. Ahí está el problema. Esta situación no empezó con el arresto de Ortega Lara, pero sí terminará con el respeto de los derechos de los presos. Entonces ETA no hará más acciones contra los carceleros , afirman. En la entrevista revelan que el asesinato del psicólogo de la cárcel de Martutene Javier Gómez Elósegui se realizó por su condición de "carcelero" y no como militante del sindicato vasco ELA. Cuando los entrevistadores les plantean la conveniencia de una tregua, los dirigentes terroristas la descartan, aunque reconocen que está socialmente extendido el deseo de cambiar la situación actual porque los últimos años "han sido duros". Incluso admiten que está extendida la necesidad de encontrar una "solución con madurez".

Pero añaden que "para solucionar los conflictos con raíces profundas no caben soluciones en el aire". "Los conflictos no se solucionan de un día para otro. No quisiéramos decepcionar a nadie; pedimos a quienes tienen el deseo de solucionar el conflicto que miren qué es lo que corresponde a cada uno y no sólo a ETA". Y afirman que mientras la sociedad vasca apuesta por la negociación, el Gobierno "está más cerrado que nunca".

También alardean de que "con el atentado contra Aznar, igual que con el del Rey, ETA demostró que tiene capacidad para condicionar de forma determinante la estabilidad de España, y así será", amenazan, "mientras dure el conflicto".