El Ministerio de Economía niega el permiso para traer un panda al zoo
El Ministerio de Economía ha denegado el permiso para la llegada al zoológico del panda gigante hembra que seleccionó el Gobierno de China para Madrid. Desde hace dos años, representantes del INIA (Instituto Nacional de Investigación Agraria, dependiente del Ministerio de Agricultura) y del Ministerio de Selvicultura chino han mantenido intensas y duras negociaciones dirigidas a que Ming-Ming, un ejemplar hembra de panda, se instalara en el zoo de la Casa de Campo durante tres años y con fines reproductores.Hace dos meses estaba todo prácticamente listo para que el animal llegara a España. Sólo faltaba un certificado de la Dirección General de Comercio Exterior del Ministerio de Economía aceptando su traslado. Contra todo pronóstico, este organismo desautorizó la llegada de Ming-Ming a España. El argumento esgrimido es que el animal tiene pocas probabilidades de reproducirse en Madrid, según un informe encargado a técnicos del Ministerio de Medio Ambiente. Ming-Ming ya estuvo cedida en otros zoológicos y nunca consiguió tener descendencia.
Ming-Ming tiene 15 años (esta especie puede llegar a vivir hasta 20). El panda que iba a ser su pareja, Chu-Lin, murió en Madrid durante las negociaciones para traer a la hembra. Pero la desaparición del emblema del zoo no paralizó el proceso. Los responsables del INIA conservan el semen congelado de este panda nacido en el zoo de Madrid para inseminar a Ming-Ming.,
La hembra elegida por China "es un animal mayor, pero tiene dos años de fertilidad. Emitir un juicio tan determinante como el que ese animal no se puede quedar preñado es osado", declaró ayer Francisco Lázaro, consejero técnico del INIA y responsable de las negociaciones con China. "A los chinos se les han puesto los ojos como platos al conocer esta decisión", añade. El acuerdo alcanzado con el Gobierno chino fijaba en tres años el periodo de estancia del animal en Madrid.
Todos los gastos derivados del ello los asumía el zoo de la Casa de Campo, una institución privada. Las negociaciones las ha llevado directamente el ministerio español, porque el Gobierno chino exige relaciones institucionales.
El director del zoo considera una "majadería" el rechazo al panda
Para quedarse con MingMing, el zoológico estaba obligado a suscribir una póliza de seguros por valor de 500.000 dólares. Y además abonar 90.000 dólares en tres años al Gobierno chino, que en teoría se emplearían en cuidar esta especie animal, de la que apenas queda un millar de ejemplares. Ningún ministerio ni institución pública española participaba económicamente en esta operación frustrada.Lázaro se lamenta de la oportunidad perdida. Más aún porque las condiciones negociadas por España resultaron más ventajosas que en el caso de otros países, que han llegado a pagar entre un millón y un millón y medio de dólares en lugar de los 90.000 pactados con el Zoo de Madrid.
El director del parque calificó ayer de "rnajadería" la postura del ministerio y añade que con esa decisión se frustran las ilusiones de muchos niños. "Además, el Gobierno español no pagaría una pesetas por el animal, ni por traerlo a España", añade.
En el informe encargado por el Ministerio de Economía a una comisión científica del Ministerio de Medio Ambiente (un requisito obligatorio en estos casos de importación de animales), se especifican tres condiciones que debe cumplir la entidad receptora del panda: que sea una institución de reconocida idoneidad y ofrezca garantías para la conservación del animal. "Este requisito lo cumple el Zoo de Madrid de sobra. Somos de los pocos parques que hemos conseguido la reproducción de un panda en cautividad", comenta Tomás Cerdán, director del parque.
La segunda condición que pusieron los técnicos de Medio Ambiente es que la cesión del animal no represente peligro para la especie. Nada que objetar tampoco en cuanto a este requisito. "Ming-Ming se encuentra ahora en un zoológico chino, en peores condiciones de lo que estaría en Madrid", comenta Francisco Lázaro.
La tercera, que hubiera una alta probabilidad de reproducción, ha sido la causante de que el Zoo de Madrid se quede sin este animal. "Ming-Ming es una hembra mayor, pero está en edad de reproducción, podría reproducirse en condiciones normales. Ésto lo dicen hasta los propios chinos", comenta el director del zoo. Ming-Ming, que a lo largo de su vida ha estado en varios zoológicos, no ha parido nunca.
"En estos momentos no hay nada que hacer, se han cerrado todas las puertas. No hay panda en Madrid", afirma Lázaro. "Me daría mucha pena ver a Min-Ming en otro zoo", añade.
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