Protagonistas de la cita de Amsterdam
El anfitrión, Wim Kok. Obligado a sacar adelante el nuevo Tratado. El conflicto franco-alemán por el Pacto de Estabilidad es la gota que colma el vaso de las dificultades.El gran patrón, Helmut Kohl. Puede dar un zapatazo encima de la mesa si las cosas se complican. Lleva ya tantos años en el Consejo Europeo que cuando un tema le aburre se va de la sala. Casi nada se acuerda sin su visto bueno.
El nuevo, Tony Blair. Dará un poco de aire fresco a este selecto club. Su sonrisa le diferencia de su antecesor, John Major, pero coincide con él en la defensa cerrada de los intereses británicos.
La sorpresa, Lionel Jospin. La victoria de los socialistas franceses le ha dado una tilde de izquierdismo al Consejo Europeo, aunque está por ver hasta dónde llega.
El gran componedor, Jean-Claude Juncker (Luxemburgo). Siempre aporta cordura y sapiencia económica a las cumbres.
El presidente, Jacques Santer. Espera sacar tajada de la polémica franco-alemana para resucitar su fracasado Pacto de Confianza por el empleo.
El duro, Theo Waigel. Tiene en sus manos muchas claves para el éxito de Amsterdam. Si no cede ante Jospin, en el Pacto de Estabilidad, la reforma corre el riesgo de no cerrarse en esta cita. El español José María Aznar. Afronta su cumbre más difícil hasta la fecha. La negociación será a cara de perro, pero tendrá la ventaja de tener a su lado a uno de los embajadores más eficaces en Bruselas, Javier Elorza.
El derrotado, Jacques Chirac. Pasará más vergüenza que nadie. La victoria de los socialistas en unas elecciones que él anticipó ha llenado de turbulencias la cumbre.
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