El alcalde desoye las peticiones sobre tráfico y multas del Defensor del Pueblo.
El Ayuntamiento de Madrid no acepta las críticas y recomendaciones del Defensor del Pueblo en materia de tráfico y multas. Así se desprende de la memoria anual entregada el lunes por esta institución a las Cortes. El titular de este organismo, Fernando Álvarez de Miranda, solicita al alcalde que modifique la actuación municipal en tres puntos relacionados con la circulación: la grúa, la ORA y la notificación de multas. El municipio ha rechazado las recomendaciones.En el apartado dedicado a la grúa, el Defensor del Pueblo sostiene, arguyendo "el perjuicio económico" y "los transtornos" que acarrea al ciudadano, que el Ayuntamiento debe limitarse "taxativamente" a retirar el automóvil cuando esté colocado en lugares peligrosos o que obstaculizan gravemente la circulación. El origen del consejo es la denuncia de un conductor que aparcó en una parada de taxis y al que la grúa le retiró el coche. El Ayuntamiento ha hecho oídos sordos a esta recomendación.
Por lo que respecta a las sanciones de la ORA, el Defensor del Pueblo cree que los funcionarios que ponen este tipo de multas deberían adjuntar algún tipo de prueba. Álvarez de Miranda sostiene que estos empleados tienen las mismas competencias para denunciar que cualquier ciudadano, por lo que no se les puede "otorgar una presunción de veracidad en las denuncias que formulan". El Ayuntamiento que afirma que va a retirar el sistema de la ORA en pocos meses, no ha aceptado tampoco esta recomendación. En el tercer punto, el Defensor del Pueblo critica que, a la hora de entregar las multa de tráfico en el domicilio de una persona, el Ayuntamiento considere "correctamente notificadas" las infracciones en las que no consta claramente que el automovilista recibe personalmente la papeleta. Álvarez de Miranda afirma que el Ayuntamiento no cumple esta norma y le insta a que lo haga. Pero "de la contestación se desprende que no ha aceptado", señala el informe.
Las quejas de los madrileños al Defensor del Pueblo sobre el tráfico se doblaron en 1996
A juzgar por la memoria del Defensor del Pueblo, los conductores madrileños están cada vez más descontentos con la circulación en Madrid. En este documento se apunta que las quejas de los madrileños que atañen al tráfico en la capital se doblaron el año pasado con respecto a 1995. Fernando Álvarez de Miranda a segura que los madrileños protestan en esta materia el doble que los ciudadanos de cualquier otra localidad española. En este apartado, el Defensor del Pueblo es terminante: existe una "creciente insatisfacción" de los ciudadanos. La mitad de las quejas no poseían un fundamento jurídico suficiente como para ser atendidas, dice el Defensor del Pueblo, pero esto no quiere decir que "no haya una actividad administrativa que pueda mejorarse".Álvarez de Miranda considera probado que a los automovilistas que cometen una infracción de tráfico "no se les facilita información suficiente" durante el proceso de tramitación de multas. Como consecuencia, los conductores "no pueden hacer uso de sus derechos de una manera más eficaz para sus intereses".
Y una medida concreta: el Defensor del Pueblo recomienda al Ayuntamiento de Madrid que "ordene" la circulación y el aparcamiento de coches en los alrededores de la plaza de toros de Las Ventas cuando hay corrida o cualquier otro espectáculo.
Con esto, y según la memoria, se evitaría que los coches queden bloqueados en segunda o tercera fila alrededor de Las Ventas. Álvarez de Miranda también pide al alcalde de Madrid que adopte "adecuadas" medidas de seguridad para la evacuación del entorno de la plaza.
Este periódico intentó ayer, sin éxito, recoger la versión del primer teniente de alcalde y concejal de Circulación del Ayuntamiento de Madrid, José Ignacio Echeverría.
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