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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Racismo silencioso

Hace unos meses, un amigo y yo solicitamos sendos puestos de profesores de inglés en un mismo centro. Tras la entrevista, mantenida en inglés, la directora me dijo que me llamaría en una semana. Pasaron casi ocho semanas, y nada. Poco después, al encontrarme con mi amigo por casualidad, me dijo que fue contratado el día despues de la entrevista. ¿La razón? Aunque la directora era consciente de que yo tenía más experiencia y conozco el idioma mejor que él (ella misma me lo dijo), por ser hijo de padres nativos, él es alto, blanco y atractivo, y yo de color. Y me pregunto: ¿es esto digno. de una sociedad democrática? ¿O acaso la buena imagen que se requiere para un trabajo va unida sólo a la raza blanca?Es vergonzoso que hoy día los empresarios tengan tendencias racistas a la hora de contratar a alguien, dejando su habilidad profesional, que es lo que cuenta para que un negocio rinda, en segundo lugar, y siempre favoreciendo a gente de raza blanca y buen físico.

Y no sólo los empresarios: la gran mayoría de la gente que se considera culta, liberal y progresista, da por hecho que la raza blanca y el buen físico equivalen a la inteligencia y profesionalidad, quizás por lo que ven en anuncios o películas, que de alguna manera es lo que tratan de transmitir a la sociedad. Parece mentira que cada vez haya más gente que presuma de estar en la universidad, de poseer tanto lujo, de estar al día sobre coches, ordenadores, marcas... y encima creyendo ser más cultos y con mayor nivel de educación por todas esas cosas. Pero, cuando una minoría lucha por una oportunidad, ¿dónde están la cultura y el nivel del que la sociedad alardea para abrirle las puertas?

Todo esto es un disfraz que oculta realmente la mentalidad retrógrada e hipócrita de la gente. La libertad que tanto se vocea no proviene sólo de un sistema de gobierno, sino sobre todo de la actitud de respeto, tolerancia e igualdad por parte de la sociedad hacia otras personas, sea cual sea su raza o su físico. Mientras a una persona no se la juzgue por su carácter, por su inteligencia y por sus habilidades, no se podrá hablar nunca de una sociedad libre.-

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