Los ciclistas podrán entrar en el metro con la bicicleta

El metro piensa acceder a partir de junio a una vieja demanda de los simpatizantes de la bicicleta. Como pasa en ciudades como Nueva York, Washington o Barcelona, los aficionados a las dos ruedas podrán montar en metro con su vehículo favorito, cosa que ahora está prohibida. Eso sí, sólo se podrá hacer en fines de semana, en festivos y en determinado horario.El objetivo es que en los fines de semana los ciclistas puedan utilizar el metro, por ejemplo, para ir a la Casa de Campo (metro Lago o Batán) o a otros parques sin que tengan que jugarse el tipo por las calles.

La razón de que esto se permita sólo en fines de semana es que el número de viajeros es mucho menor y las bicicletas no causan tantas molestias. El consejero de Obras Públicas y presidente del Consorcio de Transportes, a la postre responsable de la medida, comenta que en el mes de junio "servirá de prueba".

"Todavía estamos ultimando los detalles; en principio, se ha pensado que se pueda acceder, los días de fiesta y los fines de semana, de seis de la mañana a cuatro de la tarde", dice Cortés, que añade: "Pero pienso que quizás sea mejor dejar más margen por la tarde para que los cilistas puedan volver a casa", añade el consejero.

Primer paso

La inciativa partió del grupo ciclista Pedalibre, asociación que desde hace años lleva reivindicando el uso de la bicicleta como transporte público. "Lo del metro es un primer paso; hay que seguir pidiendo cosas", dice Gonzalo Larrauri, portavoz de Pedalibre. Larrauri recuerda que, desde hace años, Renfe permite el acceso a los trenes de cercanías con la bicicleta.No habrá que pagar un suplemento por la bicicleta. Se podrá acceder con el billete normal. Para eso será necesario que los ciclistas entren en el metro por vestíbulos en los que hay taquilleros (muchas de las entradas son completamente automáticas).

Los ciclistas tendrán que viajar en el vagón de cabecera, que es el que está más cerca del conductor, a fin de intensificar la seguridad. Cada ciclista deberá llevar una sola bicicleta. El consejero todavía piensa si permitir que en cada vagón vayan dos o tres ciclistas: "Ese es un asunto que dejaremos zanjado en el mes de prueba: por un lado, es peligroso dejar que muchos ciclistas vayan juntos en el mismo vagón, pero, por otro, no hay que olvidar que la mayoría viaja en grupo", explica Luis Eduardo Cortés.

El consejero recuerda que, con todo, "estará terminantemente prohibido montar en bicicleta en los pasillos o en los andenes, por el peligro de que, o bien se caiga el deportista o atropelle a otro viajero". Tampoco se podrán utilizar las escaleras automáticas si se lleva bicicleta.

La ciudad de Madrid, al contrario de la de Barcelona, ha vuelto la espalda a la bicicleta. En la capital catalana existen 40 kilómetros de carriles-bici bien conectados entre sí. En Madrid, sólo existen 10, en el Pasillo Verde, que no llevan a ninguna parte. Los aficionados a la bicicleta han denunciado repetidamente el hecho de que, para ir a montar en bicicleta a la Casa de Campo, muchos tengan que utilizar el coche. A partir de junio podrán ir en metro.