La Guardia Civil anotó a profesores que fueron a una protesta, según Ibarra

El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, acusó ayer de nuevo al Gobierno del PP de cometer un "atentado a la libertad" con el envío de la Guardia Civil a "algunos centros escolares" de la región en vísperas de la protesta celebrada el día 17 en Madrid en defensa de la educación pública para averiguar "quiénes iban a ir y quiénes no iban a ir a la manifestación". "Eso es tanto atentado a la libertad como puede ser el presionar a un presidente de un grupo de comunicación", subrayó ayer a la cadena Ser."Eso es el centro derecha, gente que no cree en la democracia y gente que por otra parte está demostrando una enorme debilidad e inseguridad que es el caso del presidente del Gobierno", añadió Ibarra.

El PSOE de Extremadura ya había denunciado este hecho el pasado día 16 al acusar al delegado del Gobierno, óscar Baselga, de haber dado "a la Guardia Civil instrucciones para recabar de los centros educativos de la región información sobre las personas que tenían previsto secundar la convocatoria de la marcha sobre Madrid". Según los socialistas extremeños, Baselga utilizó su cargo "para amedrentar a ciudadanos que sólo desean ejercer la libertad de expresión"."Expertos en elaborar listas negras de quienes no comparten su línea política, los dirigentes del Partido Popular sólo saben utilizar el poder para efectuar represalias políticas, perseguir al adversario e intentar el control policial de los ciudadanos, como si aún soñaran con épocas de triste recuerdo para España", afirmaron los socialistas extremeños en un comunicado, al tiempo que reclamaron a Óscar Baselga que "no utilice en beneficio de sus intereses de partido a la Guardia Civil". Los sindicatos de la enseñanza de UGT y CCOO incidieron en la misma denuncia.

Sin embargo, el delegado del Gobierno, Óscar Baselga, negó que "hubiera cursado orden alguna a la Guardia Civil. Por tanto, son completamente falsas las imputaciones que se formulan". Según Baselga, "los servicios de prevención que para estos casos establece la Guardia Civil son habituales y se desarrollan desde hace 15 años. Años estos en los que ni este delegado, ni el Gobierno que representa en Extremadura, ostentaban responsabilidades de orden público", señaló al lamentar que "se intente amedrentar a la población originando falsos escándalos, acusando sin prueba de actitudes dictatoriales desde posiciones sectarias".