Para todos los públicos

La sala se puso a rebosar de espectadores -buena parte de ellos próximos a la cuarentena- para ver y oír la presentación en directo del cuarto disco del grupo de la cantante Sharleen Spiteri. Texas goza de especial predicamento en nuestro país y había cierta expectación por ver qué tal les quedaba el cambio que apuntan en su último CD, White on blonde, a la búsqueda de un sonido más bailable, elaborado y alejado del discreto pop con raíces country que ha sido de siempre la patente de corso de estos escoceses. Pues bien, poco cambio se vio. El concierto siguió un patrón la mar de ortodoxo y previsible, con el grupo perfectamente asentado sobre las tablas. Embutida en una corta chaquetilla roja, la atractiva Sharleen Spiteri iba conduciendo el concierto con mano firme y garganta empeñada en la negritud, aunque esto último fue un esfuerzo realmente inútil. Los momentos álgidos del concierto brillaron alrededor de la interpretación de los temas más conocidos del grupo: el incontestable Lover, la hermosa Alone with you o la versión del clásico de Al Green Tired of being alone, con el que abrieron el bis, aunque alguno de sus temas nuevos -en concreto, Black eyed boy- también parece aspirar a calar hondo en el corazón de sus incondicionales, que, visto lo visto, parecen ser muchos. Más de los que se piensa.