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De cabeza a la fama

30 creadores compitieron por la Copa de España de Peluquería con ayuda de sufridos modelos

Paz Álvarez

Los amigos están para todo: para lo bueno, para lo malo y, si te descuidas, hasta para que te tiñan el pelo de color zanahoria y encima te dejen de dos tijeretazos sin cabellera. Eso es, en parte, lo que le pasó ayer a medio centenar de modelos, todos ellos ocasionales, que confiaron sus cabezas a unos 30 peluqueros, entre jóvenes y adultos, que participaron en la 18º Copa de España de Peluquería, celebrada en la sala La Riviera. Todos los participantes tenían que pasar dos pruebas: en 25 minutos preparar un recogido (moño) y en poco más de media hora un corte de pelo. Y ni peluqueros ni modelos cobraron por todo ello.Sólo por amistad con su peluquera se quedó sin su melena (de toda la vida), Rosa María Chamorro, canguro: "Somos amigas. Confío en ella y espero que si gana me invite a algo", decía la chica poco antes de empezar la sesión. Era una modelo multiusos, primero lució un moño y luego se dejó cortar el pelo. La técnica la explicó la autora de los peinados, María Jesús Loeches, una peluquera de 18 años: "Para que quede bien he tenido que poner unos mechones rubios en la parte delantera, y así el recogido quedará mucho más espectacular y de época. Y para terminar, le pego un tijeretazo y queda convertido en un corte moderno".

La modelo, entre rulos, pinzas y peines, ponía cara de circunstancias, y comentaba, todavía no muy convencida: "A ver qué tal sale todo esto, porque es la primera vez que ella concursa y que yo poso. Porque mira qué mechón me ha plantado".

Pero, para cambios, el de Isabel Llorente, una peluquera de 21 años que pira esta ocasión cedió su cabeza a su colega y amiga Almudena Manjón. Y por fiarse acabó con el pelo como una zanahoria: la cabeza color naranja y el flequillo salpicado de pinceladas verdes. "Pero si estoy más guapa que antes", exclamó la muchacha nada más verse en el espejo. "Ahora viene lo peor, porque tengo que cortárselo y se lo voy a dejar muy rapadito, no le ya a quedar casi pelo", aseguró Almudena" quien apenas disimulaba los nervios. "Es mi debú y me tiembla todo. Espero que no me tiemble la tijera, porque para los peluqueros, ésta es una manera de exhibir nuestra creatividad". Ganaron dos madrileños. Virginia Lorenzo quedó primera con un moño en tres niveles y un corte en dos colores: negro y naranja. En segundo lugar se situó Alfonso Ortiz.

Y como broche un anticipo para llevar el pelo a la última. Lo resumió Paquita Berenguer, que por los aplausos y besos que recibió, debe ser algo así como una diosa en peluquería: "Se lleva el pelo natural, desfilado, con melenita pero a capas. Y nada de rapados. Los moños siguen igual que siempre, se imponen en bodas y demás saraos y dependen de la forma de la cara: bajos para los rostros silueteados y altos para los cuellos cortos y caras redondas".

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Sobre la firma

Paz Álvarez
Periodista especializada en gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, tiene un programa de desarrollo directivo por el IESE. En 1993 comenzó a escribir en la sección de Madrid y, en 1997, se incorporó al diario CincoDías, donde creó la sección de Directivos y ha sido jefa de la sección de Fortuna hasta 2022.

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