Idígoras cobrará 250.000 pesetas al mes tras obtener una pensión de invalidez

El dirigente de Herri Batasuna (HB) Jon Idígoras, de 61 años, se ha convertido por ley en un pensionista de lujo que cobrará 250.000 pesetas mensuales libres de tributación a Hacienda, según adelantó ayer la Cadena SER. La Seguridad Social ha concedido al ex diputado abertzale una pensión por invalidez absoluta debido a la grave enfermedad respiratoria que padece y tomando como base, fundamentalmente, las cotizaciones que realizaron. por él a la Seguridad Social las Cortes Generales entre septiembre de 1990 y mayo de 1996 por su condición de parlamentario. En esos seis años, Idígoras únicamente acudió en tres ocasiones al hemiciclo. La Mesa del Congreso suspendió a los parlamentarios de HB en 1991 y 1996 de sus derechos económicos por su reiterada inasistencia a la Cámara.El Instituto Nacional de la Seguridad Social concedió el pasado 31 de enero una pensión por invalidez absoluta con carácter retroactivo al 1 de junio de 1996 al dirigente de HB por la grave dolencia respiratoria que sufre. El tribunal médico que le examinó dictaminó que padecía una insuficencia respiratoria y una afección pulmonar complicada por problemas de bronquitis. Como contrapartida, no podrá realizar ningún trabajo remunerado.

Una vez fijada la dolencia del dirigente de HB, una comisión de la Seguridad Social determinó que debería tener una pensión de invalidez absoluta con una cuantía de 250.000 pesetas mensuales. Para fijar la cuantía de las pensiones se tienen en cuenta las cotizaciones del solicitante de la pensión durante los últimos ocho años. Hasta julio de 1990, Idígoras presentó en la Seguridad Social las cotizaciones realizadas por trabajos eventuales en varias empresas. Para los otros seis años, el Estado consideró las aportaciones realizadas por las Cortes a la Seguridad Social por el dirigente independentista en su calidad de diputado del Congreso. Idígoras presentó su sueldo de parlamentario para obtener una pensión del Estado al estar acogido al convenio especial que re9u la la inclusión de los parlamentarios en el Régimen General de la Seguridad Social.

Desde septiembre de 1990 a mayo de 1996, el Congreso cotizó por Idígoras el máximo establecido en el citado convenio. Sin embargo, en estos seis años, Idígoras y sus compañeros de escaño sólo acudieron al hemiciclo en tres ocasiones. La primera vez, el 11 de septiembre de 1990, al debate sobre el envío de fuerzas militares españolas al conflicto del Golfo. Tras su intervención, se acercó al entonces presidente del Gobierno, Felipe González, para decirle: "Vamos a volver".

Pero los representantes de HB tardaron casi cuatro años en volver a la Cámara. El 11 de mayo de 1994, Idígoras subió por segunda vez al estrado para intervenir en el debate ante la comparencia de González para informar sobre la fuga de Luis Roldán. Entonces acusó a todas las instituciones democráticas "desde la Corona hasta la Guardia Civil de ser responsables del clima de corrupción desatado en España". Su última intervención fue el 14 de marzo de 1995 para defender una proposición contra la dispersión de los presos de ETA.

El vicepresidente Francisco Álvarez Cascos dijo ayer en Bilbao que el Gobierno no tiene nada que objetar a la pensión de Idígoras pero pidió a HB que reflexione sobre su actitud de acogerse a la ley cuando ésta les ampara y combatirla con la violencia cuando no es de su agrado.