Aznar descarta "la más mínima posibilidad" de remodelar su Gobierno "ni ahora ni en agosto"

Ni cambios en el Gobierno, ni adelanto de las elecciones generales, ni entrada al trapo de nuevos enfrentamientos con CiU. El presidente del Gobierno, José María Aznar, pretende transmitir tranquilidad y estabilidad. Ayer, ante el comité ejecutivo y la junta directiva nacional del PP, ofreció dos mensajes contra los sobresaltos: no remodelará su Gabinete, "ni ahora ni en agosto", y no se plantea acortar la legislatura. En línea con la consigna de evitar roces con CiU, Ángel Acebes, coordinador del PP, calificó de "mitin fin de semana" la expresión de Pujol de que les ha hecho "pasar por el aro".

José María Aznar identifica la imagen de su Gobierno en la sociedad como estable, sólida y arraigada. Así la definió ayer para, a continuación, descartar cualquier posibilidad inmediata o a medio plazo de cambios en su Gabinete. Aznar admitió que asumía como un "divertimento" gracioso los comentarios sobre una inminente remodelación de su Gobierno. Especulaciones que se han multiplicado tras el infarto sufrido por el titular de Exteriores, Abel Matutes.Sin citar nunca a Matutes, pero englobándolo en sus comentarios, Aznar afirmó rotundo: "Hoy hay estabilidad de Gobierno y parlamentaria". El presidente intentó cortar así, de manera genérica, la catarata de quinielas tanto sobre un presunto ajuste de ministros como sobre una reducción de la legislatura.

Aznar aseguró que no tiene "la más mínima intención de producir ningún cambio de Gobierno ni ahora ni en agosto". Más tarde, tras glosar la bonanza de los acuerdos de gobernabilidad pactados con los nacionalistas, precisó: "No contemplo ningún horizonte o escenario de acortamiento de la legislatura".

El presidente eludió alusiones concretas a los continuos problemas con CiU o el PNV, pero dejó marcado el terreno a seguir. Así, admitió que el PP no puede estar de acuerdo "en todo" con CiU y el PNV porque son partidos distintos y, además, nacionalistas. Sí se mostró a favor de buscar "puntos de acuerdo en lo esencial", "de prestigiar esos acuerdos" y de "acotar las discrepancias".

"Pasar por el aro"

Cuando se le preguntó ayer varias veces al coordinador general del PP si Aznar u otro dirigente del partido había analizado el nuevo tono reivindicativo de Pujol y sus manifestaciones específicas sobre que CiU les había hecho "pasar por el aro" como antes hizo con el PSOE, Ángel Acebes rehuyó la polémica. Así, habló de que lo importante para España "es el cumplimiento de los acuerdos y compromisos de investidura".Acebes despachó las declaraciones de Pujol como propias "de mitin de fin de semana, con trascendencia sólo para afiliados". Ésa es la consigna oficial del partido. Así lo refrendó ayer mismo Mariano Rajoy, el ministro de Administraciones Públicas. Para el PP, Pujol ha entrado ya en la dinámica electoral. Conclusión: ni un roce de más.

El vicepresidente primero, Francisco Álvarez Cascos, sí se permitió un tono irónico al indicar, con su sentido del humor: "En el PP no conocemos más aros que los olímpicos".

El secretario general del PSOE en el Congreso, Jesús Caldera, pidió "cuentas" al Ejecutivo por esas manifestaciones de Pujol y las enmarcó en la "extrema debilidad" del Gobierno.

El coordinador del PP no quiso reconocer oficialmente que el partido trabaja ya con la vista puesta en las elecciones catalanas, aunque las evidencias son otras. Ayer mismo, tanto el presidente del PP en Cataluña, Alberto Fernández, como el del País Vasco, Carlos Iturgaiz, inauguraron un turno de intervenciones de responsables territoriales para exponer su ritmo de crecimiento e implantación por sectores. El propio Aznar avaló los informes de ambos y subrayó que no va a aceptar nunca "la neutralización" del partido en esas comunidades.

Iturgaiz y Fernández reivindicaron para el PP, en sus territorios, la función de oposición, aunque el dirigente catalán recordó que su partido también ayuda a CiU en la gobernabilidad de Cataluña. Fernández, sobre la alusión al aro de Pujol, bromeó haciendo referencia a un famoso domador de circo: "Que yo sepa, el presidente de la Generalitat se llama Jordi Pujol y no Ángel Cristo".