LA CUSTODIA DE MACAULAY

Un juez neoyorquino ha prohibido a los padres del actor Macaulay Culkin que administren su fortuna, culminando una batalla legal en la que el joven actor de Solo en casa ha perdido su reputación en Hollywood y ha estado a punto de arruinarse por la pésima labor contable de sus progenitores. Las penas de Macaulay Culkin estaban predestinadas a una crisis de este tipo. Su carrera la fabricó con brocha gorda un padre hiperprotector y voraz llamado Kit Culkin. Tras el exitazo internacional de Solo en casa, Macaulay era una estrella infantil supercotizada, pero su vida personal era un desastre. Patricia Brentrup, su madre, nunca se casó con su padre, y ambos llevan varios años en una batalla legal por la custodia de seis de los siete hijos mientras se repartían las comisiones del trabajo de Macaulay y su hermano Kieran en el cine. En juego están 17 millones de dólares (cerca de 2.500 millones de pesetas), que por decisión de Macaulay pasarán a ser administrados por un contable. Además, el juez del caso decidió que el antiguo abogado de Macaulay, Ken Weinrib, asumiera su custodia legal hasta que alcance la mayoría de edad. La familia Culkin vive distribuida en varios apartamentos de un edificio de Manhattan, y cuando no están tirándose los trastos a la cabeza, están acusándose de robo y abuso los unos a los otros. Macaulay Culkin, de 16 años, cuya carrera en el cine está prácticamente acabada, ha perdido por completo su aspecto de niño gracioso y hasta se le ve fumando algo que parece un porro en un periódico local de Nueva York. Actualmente se está rodando ya Solo en casa 3, con otro niño.-