Barranco perdió la alcaldía dos meses después de la marcha de Soto

, El ex alcalde de Madrid, Juan Barranco, perdió su sillón sólo dos meses después de que Francisco Javier Soto decidiera dejar el Ayuntamiento de Madrid. En tres días, Barranco pasó de ser un regidor reforzado por dos tránsfugas, que le prometieron su apoyo, a un alcalde apeado del cargo por la moción de censura que presentaron PP y CDS. Los dos tránsfugas que le apoyaban le sirvieron de poco. Uno, Soto, dejó su acta de concejal al siguiente en la lista del CDS, Fernando López-Amor. El otro, Manuel Martínez Parrondo, hizo un viaje de ida y vuelta y regresó a su grupo municipal.

Al conocer por EL PAÍS las maniobras del ex concejal Fernando López-Amor, desde el lunes director general de RTVE, para conocer la situación fiscal de Soto, Barranco estalló: "La derecha ha demostrado que es capaz de hacer cualquier cosa por el poder".

Después, el ex alcalde recordó algún episodio de aquel tormentoso mes de abril. "A Martínez Parrondo, que ofreció una conferencia de prensa anunciando su apoyo al Gobierno municipal, le secuestraron en una cafetería y le presionaron al máximo. Después vino a verme, llorando, para decirme que se tenía que volver atrás. Quien estaba de testigo era Joaquín Leguina".

A Soto, según Barranco, le hicieron también "todo tipo de presiones". "Oímos entonces que se estaba investigando su vida familiar. Ahora también sabemos que se estaba investigando su patrimonio de una manera sucia y oscura". "La derecha demostró entonces lo que era. Ahora siguen haciendo lo mismo. En la preparación de la moción de censura contra nosotros hubo de todo y nada limpio. Hicieron todo tipo de gestiones o coacciones, como se ha venido a demostrar ahora. Además, para rematar este cuadro tétrico, López-Amor, el hombre que investigó a su ex compañero utilizando su cargo de inspector de Hacienda, se pasó al PP unos meses antes de las elecciones de 1991.