El primero de los sextillizos de Huelva sale del hospital
Ángel Raposo Clavijo, el sextillizo que nació con más peso, recibió ayer el alta médica del hospital Juan Ramón Jiménez, de Huelva, con'44 días de vida y 2.365 gramos, en un estado físico "muy bueno", según los facultativos. Los sextillizos, que vieron la luz por cesárea de la madre el pasado 5 de diciembre, en la 30a semana de gestación, han evolucionado "extraordinariamente, aunque siguen siendo críos muy frágiles", según informaron a EL PAÍS las mismas fuentes. Dos de ellos continúan ingresados en las incubadoras de la Unidad de Cuidados Intensivos y tres han pasado a la planta de prematuros. El peso de los otros cinco bebés oscila entre 1.500 y 1.060 gramos.Un escueto comunicado firmado por el director del Juan Ramón Jiménez, el doctor Manuel Alén, señala que "la evolución de todos es favorable y similar a los bebés de su peso y edad gestacional, y los controles realizados hasta ahora son normales".
Los médicos examinaron a mediodía de ayer el fondo de ojo de Angel, "un control que se realiza a los prematuros cuando cumplen las seis semanas, para comprobar si el oxígeno les ha dañado" . Los sextillizos precisaron durante los primeros días de vida respiración asistida, lo que sirve como ayuda inmediata, pero posteriormente puede dejar secuelas. La prueba resultó favorable.
Revisiones médicas
Rosario Clavijo Pérez, de 31 anos, la madre, deberá llevar a Angel a periódicas revisiones médicas cuando cumpla los seis, nueve y doce meses de vida.Los médicos han extremado el cuidado de los sextillizos. "No hay que cantar victoria, es necesario seguir atentos. Yo no estaré tranquila hasta que cumplan años y los vea correr", dijo ayer Fátima Aburto, responsable. de la UCI neonatológica.
Rosario se encuentra junto a su marido en Bollullos par del Condado, la localidad donde viven, desde el pasado 20 de diciembre, cuando recibió el alta médica. "Chari, tras los primeros momentos de euforia, se encuentra preocupada, porque se ha dado cuenta de que se le viene encima el cuidado de seis niños", comentó a este periódico una vecina del pueblo.
La mujer se ha ocupado, sobre todo, de buscar una casa a su gusto para alquilarla, hasta que la Junta de Andalucía construya la vivienda que ha prometido al matrimonio. El alquiler también correrá a cargo de la administración autonómica. "Quiere un piso con mucho sol y de planta baja, para no tener que subir y bajar escaleras con los niños", dijo la vecina.
La pareja ha comenzado a sentirse intranquila debido a los retrasos en las ayudas prometidas por las distintas administraciones. El padre, Miguel Ángel Raposo, rechazó sin embargo hace unos días un puesto de trabajo fijo que le ofreció el Inem. Consideró que ese trabajo no convenía a las características de su familia, porque le ocupaba mañana y tarde.
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