'Diario 16' informó de un secuestro de su edición de hoy que resultó ser falso

Diario 16 avisó anoche a cadenas de radio, agencias y algunos periódicos de un supuesto secuestro del que iba a ser víctima. Según fuentes del propio medio, una persona no identificada, que dijo ser funcionario de la plaza de Castilla -Ia sede del juzgado de guardia de Madrid- les había comunicado telefónicamente la existencia de una orden judicial de secuestro. La noticia se reveló falsa, así como. los detalles sobre supuestos policías que se presentaron a ejecutar la orden judicial y sobre la orden misma, que tampoco existió.

El juez que estaba anoch de guardia en Madrid, José Emilio Coronado, confirmó a EL PAÍS que no existía orden alguna de secuestro. Él estaba censado en un restaurante próximo al juzgado cuando un agente de seguridad le dijo: "Don. José Emilio, he escuchado en la radio que han secuestrado el Diario 16. "¿Ah, sí preguntó el magistrado. "¿Y quién lo ha secuestrado?". "Pues dice la radio que el juez de guardia", contestó el agente. «¡Pero si el juez de guardia soy yo!", exclamó el juez, única persona con facultades legales para tomar anoche esa medida.Desde su domicilio, el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, manifestó a este periódico que no tenía más noticias del supuesto secuestro que las que estaba escuchando por radio y televisión. Y añadió que ni él, ni los demás jueces de la Audiencia Nacional podían tener algo que ver con la medida. "No tenemos competencia" para ello, preciso.Según el director de Diario 16, Juan Tomás de Salas, fue el abogado del periódico, Gregorio Arroyo, el que recibió a los policías que supuestamente tenían que realizar el secuestro y el que rechazó la orden judicial. Pero Arroyo, presente en las rotativas pasada la medianoche, manifestó a EL PAÍS que él estaba viendo el fútbol cuando le llamaron y que él, no había visto a ningún agente de policía, ni nadie le había entregado ningún requerimiento.

A las 0.30, el administrador único de Diario 16, Alberto Conde, señaló en la rotativa del pe riódico que, a los 15 minutos de recibirse la comunicación anónima en la redacción, dos personas se habían presentado ante la caseta de seguridad de las rotativas y habían solicitado hablar con el responsable del taller. Sin embargo, tanto el agente de segur¡ dad como el jefe de taller aseguraron que en, ningún momento habían recibido visita policial o judicial alguna. Minutos después, desde la redacción de Diario 16 se ofreció una nueva versión. Un portavoz informó que allí no se había recibido comunicación alguna del supuesto secuestro de la edición y que el aviso había partido de la propia rotativa. Según este relato, cuatro agentes de la Policía Judicial se habían personado en los talleres para anunciar la retirada de la edición. A la 1,30 horas de hoy, un comunicado de Diario 16 firmado por el subdirector, Joaquín del Río, aseguraba que las personas que se habían identificado en el centro de impresión del rotativo como policías judiciales "no son tales" y que "la autenticidad de la orden de secuestro que han presentado aún no se ha podido comprobar, pero existen razones para sospechar que pueda ser falsa".

En su edición de hoy, Diario 16 cuenta que Amedo aseguró a Pedro J. Ramírez, director de El Mundo, que el juez Garzón le había comentado que "había que joder a los de arriba" y evitar inculpar a simples funcionarios de policía, según una cinta magnetofónica que reproduce el periódico. La declaración de Amedo se produjo durante las sesiones de grabación de las llamadas confesiones que Amedo realizó a Ramírez y al periodista Melchor Miralles en un hotel de Madrid en diciembre de 1994 y que El Mundo publicó simultáneamente a la reapertura por el juez Garzón del caso GAL.

Diario 16 asegura que Amedo y Ramírez actuaron "a las órdenes" de Garzón, que acababa de regresar a la Audiencia tras su frustrada aventura política. Diario 16 recuerda que El Mundo publicó el serial de Amedo los días 27, 28, 29 y 30 de diciembre de 1994. El día 28 de ese mismo mes, Mario Conde ingresaba en prisión tras presentarse contra él, el día 15, una querella criminal por su gestión en Banesto.