RISAS POR ZAIRE

El actor Rafael Álvarez, El Brujo, decidió hace escasas semanas ofrecer una función de su popular espectáculo El Lazarillo de Tormes, en versión de Fernando Fernán-Gómez, para recaudar fondos para Zaire. Le costó encontrar apoyos porque, según él, "Zaire ya no está de moda". Pero lo cierto es que la representación se celebró el pasado lunes, no sólo con el apoyo del teatro Albéniz, que cedió la sala, que terminó abarrotada, y el Centro Dramático Nacional, que cedió el equipo técnico, sino con la presencia de la familia real y la ausencia de famosos y responsables culturales del Gobierno. Don Jnan Carlos, doña Sofía, el príncipe Felipe y la infanta Cristina se mostraron encantados con las gansadas, llenas de arte escénico, de El Brujo, y se pudo ver cómo se desternillaban en sus butacas durante la función y cómo se pusieron en pie, al final, para aplaudirle. A la salida comentaron, tras saludar con entusiasmo a Rafael Álvarez y su equipo, que era inimaginable que un actor tuviera tantos registros escénicos. La recaudación por taquilla superó los dos millones de pesetas que distribuirá en Zaire la ONG Médicos sin Fronteras.-