Estevill aceptó una querella contra directivos de Macosa 12 días después de inhibirse

El ex juez Luis Pascual Estevill admitió a trámite una querella de la Asociación de Defensa del Accionista (ADA) contra los directivos de Macosa, empresa presidida por Eduardo Santos, 12 días después de haber emitido un auto por el cual se inhibía de la instrucción del caso Macosa en favor de la Audiencia Nacional.Estevill había recibido el día 9 de diciembre de 1992 los cheques bancarios con las fianzas negociadas para poner en libertad a Santos y su equipo, supuestamente después de que éstos le entregasen, a través de los abogados Juan Vives y Juan Piqué Vidal, 31 millones de pesetas para que tapase el caso.

El denunciante primero del caso Macosa fue el súbdito alemán Wilhelm Richard Lumb, quien formuló una denuncia el 28 de abril de 1992 tras la compra de 950 acciones de Corporación Arco (nombre posterior de Macosa) y después de que "unos amigos" le informasen de que la empresa falseaba sus balances.

Los directivos de Macosa recibieron la noticia de esta denuncia del penalista Juan Piqué Vidal, al que "por su nivel de información en el asunto" encargaron la defensa y hoy consideran eje central de la conspiración en la que aseguran que participaron el ex juez Estevill, ADA y el alemán Lumb.

El reparto de la denuncia correspondió al Juzgado número 7, que admitió a trámite el escrito y abrió diligencias previas el 29 de abril de 1992. Este juzgado remitió las actuaciones al juzgado de Estevill (número 26) "porque los hechos objeto de la denuncia tuvieron lugar dentro de las 72 horas anteriores al comienzo del servicio de guardia el referido juzgado". Durante la instrucción, Estevill encarceló a Federico Albiñana, consejero delegado de Macosa, y firmó un auto de busca y captura contra Santos, residente en Miami (EE UU).

Según los denunciantes, el juez quería hacer coincidir el ingreso de fondos con su inhibición, que firmó el 4 de diciembre de 1992. Justo la misma fecha en que Santos y su equipo sacaban del banco el importe de las fianzas que cinco días después les impondría Estevill.

En el caso por cohecho contra Estevill, los ex directivos de Macosa denuncian que todo fue una conspiración para sacarles dinero. Ante el tribunal se ha denunciado que los querellantes de ADA recibieron cinco millones para que no presentaran su querella. También se ha denunciado que el mediador bursátil que compró las acciones de Lumb fue Pentor, el mismo que compró las acciones, de ADA.