El PCE apuesta por mantener vivo el debate político sobre la república
El Partido Comunista de España (PCE) apuesta por mantener el debate sobre la república y que no quede en "una salva sin efecto" cree que los contactos con el PSOE deben terminar y limitarse a "la natural relación sobre legislación en cosas concretas", cuestiona la eficacia de la campaña de Izquierda Unida (IU) sobre la OTAN y duda sobre los propios dirigentes del PCE que "ridiculizan" a Julio Anguita y luego se aprovechan de su capacidad de convocatoria. El PCE, según un documento debatido en su último comité ejecutivo, reconoce que al PSOE "no le va mal" en la oposición.
Es un panorama sombrío y unas conclusiones desalentadoras. El análisis que contiene el documento del PCE es , en el fondo, un repaso a la política del partido y, por extensión, a la de la coalición de la que forma parte, IU. No es para echar cohetes, aunque dentro del agrio escepticismo que respira el texto no deje de haber un trasfondo de confianza en el futuro del PCE.En el capítulo dedicado al partido, hay un reconocimiento explícito a las tensiones internas, con quejas sobre lealtades y posiciones. Se llega a poner en cuestión si es posible "hablar de utilidad del PCE sin una cohesión en sus miembros". "¿Se puede estar en una misma organización en la que hay sectores que cuestionan el posicionamiento de IU sobre pensiones o sobre la OTAN o sobre Maastricht?", se pregunta el documento.
Y se denuncia que se "intenta ridiculizar al secretario general del PCE y coordinador general de IU por sus posiciones sobre la Alianza Atlántica y en otras cuestiones, al tiempo que se utiliza su autoridad política y moral y su capacidad de convocatoria". Pero, ¿a quién o a quiénes se refiere el documento?. Verde y con asas. Las fue ntes consultadas apuntan a la denominada tercera vía de IU y del PCE. Y, más concretamente, a la federación de Madrid, a Ángel Pérez, responsable de esta federación, y, en una visión más amplia, a Rosa Aguilar y otros dirigentes moderados del PCE.
El texto del comité ejecutivo habla de la necesidad de 1legar a acuerdos sólidos, firmes y de futuro por parte de la inmensa mayoría del PCE", sin lo cual, "hablar del PCE, de su papel y de su necesidad es un ejercicio inútil o cínico, o ambas cosas a la vez", concluye el escrito.
Pero no sólo se habla de cuestiones internas, el PCE apuesta por mantener el debate sobre la república -"una cuestión de mucho eco", dice el texto-, "que es el debate de la crisis constitucional y política" y que no debe quedar en "una salva sin efectos". Se habla del debate de la OTAN admitiendo paladinamente su fracaso. Las acciones -se admite en un alarde de sinceridad que casi roza el cinismo- "o son directamente boicoteadas y ridiculizadas o desarrolladas con oficio y sin emoción". "EE UU continúa mandando. Europa callando. Nosotros pataleando sin más".
Sobre las movilizaciones se afirma que "desbordan a los sindicatos" y se pone como ejemplo la agresión a los sindi calistas en la huelga ' de la minería de León. "Poco a poco", dice, "se van creando focos amplios de contestación airada a los sindicatos" y se pronostica para las centrales obreras "un futuro de zozobra".
Sobre el PSOE y sus relaciones con IU, el PCE alerta de que los socialistas intentan "hegemonizar la izquierda" y "laminar a IU". Denuncia que hacen una "oposición de imagen que, a tenor de los sondeos, no le va mal". Se insiste en la coincidencia de las políticas del PP y del PSOE y se aboga por diferenciarse de los socialistas a la hora de hacer oposición. Las reuniones que IU mantiene con el PSOE "no deben eternizarse". "Es preciso", dice el escrito, "que pronto se decante la situación y se remitan los contactos a la natural relación sobre legislación en cosas concretas".
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