El ministro se siente respaldado, por Aznar

El ministro de Industria, el independiente Josep Piqué, dijo ayer en Barcelona que se siente "absolutamente respaldado por el presidente del Gobierno y el PP" tras su actuación en la crisis de la minería y dijo que no descarta negociar con la Comisión Europea la prolongación de las ayudas públicas al carbón español más allá del año 2002. "En ningún momento se me ha pasado por la cabeza dimitir", aseguró tras intervenir en unas jornadas sobre el futuro de la automoción organizadas por el Instituo de Estudios Superiores de la Empresa (lese). Insistió en que el acuerdo con el sector de la minería no retrasará la firma del protocolo eléctrico que se concretara en días próximos.Sin embargo, Piqué sí se vio verdaderamente acorralado por las críticas de varios diputados y dirigentes populares de León el pasado lunes en la sede central del PP. Piqué, acusó al periodista Luis del Olmo, el conductor del programa Protagonistas de Onda Cero, de ser el "provocador" y "agitador" de las movilizaciones sociales y sindicales en León. El ministro fue incluso más lejos y calificó al periodista, sin citar su nombre, de "mensajero mesiánico".

Juan Morano,diputado del PP de León, ex alcalde de la capital y conocido por su vehemencia, no aguantó más cuando escuchó a Piqué meterse con su amigo Del Olmo. Fue en ese momento cuando recuperó su discurso más encendido para acusar al ministro de "no tener ninguna credibilidad ni criterio". Álvarez Cascos, y el coordinador general del PP, Ángel Acebes, no intervinieron ni para defender al ministro ni para rectificarle.