Interior niega que exista relación entre Galindo y la vigilancia a Txofo

El Ministerio del Interior ha rechazado que exista vinculación oficial entre el general de la Guardia Civil Enrique Rodríguez Galindo -procesado por los secuestros, torturas y asesinatos de los presuntos etarras José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala- y la vigilancia de que fue objeto el testigo de cargo en ese caso, Pedro Luis Miguéliz Dabadie, Txofo, por parte de dos agentes del instituto armado.En una respuesta parlamentaria el Ejecutivo constata que en las fechas en que se detectó la vigilancia a Txofo, Rodríguez Galindo se encontraba en situación de disponible, "por lo que carecía de funciones relacionadas con este asunto, ni con ningún tipo de servicio".

Además se señala que "los dos componentes del Cuerpo de la Guardia Civil implicados en el incidente se encuentran destinados en la Comandancia de Guipúzcoa, y en el momento de producirse los hechos se encontraban fuera de servicio, de lo que se deduce que no recibieron orden alguna".

Txofo ha sido vigilado y amenazado por personas desconocidas desde que declaró ante el juez Gómez de Liaño en el caso Lasa-Zabala, incluso la ex secretaria de Estado de Interior, Margarita Robles ordenó al general de la Guardia Civil Francisco Fuentes que cesaran las vigilancias sobre el testigo. Finalmente, a principios de este verano, los escoltas de Txofo consiguieron identificar a dos agentes del cuartel de Intxaurrondo en un bar, cuando supuestamente controlaban sus movimientos.

Interior ha informado, en su respuesta parlamentaria, que "tan pronto se tuvo conocimiento de los hechos, en la Dirección de la Guardia Civil se dió orden de proceder a instruir un expediente disciplinario a fin de esclarecer la actuación, adoptando las medidas cautelares oportunas".

El pasado 30 de septiembre, los dos agentes implicados en el incidente se reincorporaron al servicio, aunque el expediente sigue su curso, puesto que su resolución definitiva no se producirá hasta que haya un pronunciamiento firme de la autoridad judicial.